El gobierno de la Argentina publicó este jueves una solicitada en algunos de los principales diarios de Israel -y prevé hacer lo mismo esta semana en el New York Times- pidiendo la liberación de los rehenes en manos del grupo terrorista Hamas, varios de los cuales son originarios del país sudamericano.
La solicitada fue publicada en los diarios y portales Israel Hayom, Iediot Ahronoth, Ynet, Haaretz (en hebreo e inglés) y Jerusalem Post, con la firma del presidente de Argentina, Alberto Fernández.
En el texto, Fernández remarcó que «Argentina exige la libertad inmediata e incondicional de las personas secuestradas por el grupo Hamas, en especial de nuestros compatriotas».
Se estima que veintiuna de las cerca de 240 personas secuestradas por Hamas durante el ataque terrorista del 7 de octubre contra las comunidades israelíes en la zona fronteriza con Gaza tienen también la nacionalidad argentina.
Dar «visibilidad al reclamo» de la liberación de los rehenes
Citando fuentes de la cancillería, la agencia estatal de noticias argentina, Telam, dijo que el texto será publicado este viernes en el New York Times, de Estados Unidos, «y también en medios de habla inglesa, hebrea, árabe y también en español».
Familiares de rehenes de Hamás piden ayuda a Europa
— DW Español (@dw_espanol) November 8, 2023
Mientras el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu reitera que no accederá a un cese el fuego sin previa liberación de rehenes, los familiares de algunas de las personas retenidas en Gaza por Hamás viajaron a Bruselas para… pic.twitter.com/VMlmbiNllS
De esta forma, se busca dar «visibilidad al reclamo por la liberación» de los rehenes matenidos cautivos por Hamas en la Franja de Gaza, añadió Telam.
Hablando con una emisora local, el ministro de Exteriores de Argentina, Santiago Cafiero, dijo que Fernández «está en permanente contacto» con los familiares de los rehenes compatriotas capturados en Israel.
«Es importante estar muy cerca de las familias, seguir estando encima con esta temática», añadió el jefe de la diplomacia de la Argentina, donde se encuentra la comunidad judía más grande de América Latina.
A través de la solicitada, Fernández exigió «la libertad inmediata e incondicional de las personas secuestradas por el grupo Hamas, en especial de nuestros compatriotas», y lamentó «las terribles consecuencias del conflicto sobre las mujeres, niños y civiles palestinos e israelíes».
Fernández se diferenció de Boric y Petro
Con la solicitada, el presidente argentino se puso en sintonía con otros mandatarios que pidieron «una tregua humanitaria» en Gaza y llamaron a una «solución pacífica y duradera» del conflicto entre Israel y los palestinos, pero se diferenció del tono belicoso de sus pares de Colombia, Bolivia y Chile.
El presidente @alferdez se reunió con autoridades de @InfoAMIA, @DAIAArgentina, @CongresoJudio y @OSArgentina, con quienes analizó la situación en la Franja de Gaza y se comprometió a seguir trabajando para lograr la liberación de los rehenes argentinos.https://t.co/x4dkpC4Psu pic.twitter.com/alHAPanAea
— Casa Rosada (@CasaRosada) November 3, 2023
En efecto, a fines de octubre, el gobierno de Bolivia anunció la suspensión de las relaciones diplomáticas con Israel a causa de lo que describió como una reacción «agresiva y desproporcionada» frente al ataque del 7 de octubre.
Durante los días posteriores a la agresión de Hamas, los gobiernos del presidente de Colombia, Gustavo Petro, y del de Chile, Gabriel Boric, habían dado a conocer, por separado, su decisión de convocar a sus respectivos embajadores en Tel Aviv a «consultas» por la guerra en Gaza.
Petro incluso debió sufrir la suspensión de ayudas militares israelíes para Colombia por no haber condenado de manera inequívoca el ataque terrorista y no descartó romper también relaciones con Jerusalén.
A la lista de países latinoamericanos que convocaron sus embajadores en Israel se sumó, a principios de noviembre, Honduras, en una declaración en la que también criticó la situación humanitaria en Gaza, el enclave palestino donde Hamas cuenta con cuarteles y armamentos.