Autoridades de Argentina afirmaron que existe la posibilidad de que la vacuna israelí contra el coronavirus, que actualmente se encuentra en Fase II de pruebas clínicas, se fabrique también en el país sudamericano
En el gobierno de Jerusalén «tienen interés en montar una línea de producción en Argentina, que sería la primera del mundo» en fabricar esta vacuna fuera del país de origen, señaló el embajador de Buenos Aires en Israel, Sergio Urribarri.
Citado por la agencia estatal de noticias Télam, el diplomático dijo que ahora «sería necesario encontrar una farmacéutica argentina que actúe como socia local» de los desarrolladores de la vacuna israelí, conocida como Brilife.
Además, Argentina está interesada en sumarse a la Fase III de las pruebas de la vacuna israelí, para lo cual se necesitarían «entre 24.000 y 30.000 voluntarios», destacó el embajador.
Según Télam, Urribarri mantuvo una reunión con autoridades del Hospital Hadassah -donde se están realizando las pruebas clínicas con Brilife- y del Instituto de Investigación Biológica (IIB) de Israel, creadora de la vacuna.
La Fase II de las pruebas clínicas comenzó en Israel en diciembre del año pasado, «y se estima que terminará en dos meses», abriendo paso a la etapa siguiente de tests con voluntarios, afirmó Urribarri.
El embajador aseguró que tanto las autoridades del Hadassah como del IIB «manifestaron que consideran que el nivel médico y de infraestructura farmacéutica en nuestro país es excelente y permite que se desarrolle la producción en la Argentina».