Por Juan Carlos Dos Santos (especial para IsraelEconomico)
Una de las promesas electorales de Santiago Peña, ya proclamado oficialmente vencedor de las elecciones presidenciales de Paraguay, fue la de reconocer a la ciudad de Jerusalén como capital del estado de Israel, situación que debe materializarse con el traslado (nuevamente) de la embajada a la ciudad sagrada de los judíos.
Peña, quien alguna vez describió a Jerusalén como «el lugar del que nunca tuvimos que salir», recibió un llamado telefónico de Benjamin Netanyahu, primer ministro de Israel, para felicitarlo por la resonante victoria electoral del pasado 30 de abril.
Netanyahu habló en la noche del martes con Peña, lo felicitó por la victoria electoral y destacó el compromiso mutuo de fortalecer las relaciones bilaterales apuntando a promover mayores iniciativas económicas, y de crecimiento y prosperidad para ambos países.
El primer ministro israelí saludó además la intención del presidente electo Peña, de regresar la embajada de Paraguay a Jerusalén inmediatamente después de asumir el cargo en agosto próximo.
Según reportó la oficina de Netanyahu, los dos líderes acordaron «reunirse pronto» y discutir la cooperación económica entre sus países. No trascendió, por ahora, si Peña invitará al jefe de gobierno israelí para la toma de posesión del próximo 15 de agosto en Asunción.
Excelente reunion con el Presidente Electo @SantiPenap. Hablamos de su intención de mudar la embajada de #Paraguay a nuestra capital #Jerusalem asi como sobre proyectos de cooperación, que estrecharían las relaciónes entre #Israel ???????? y #Paraguay ???????? pic.twitter.com/bxuG8L3jVu
— Yoed Magen ???????? (@MagenYoed) May 31, 2023
Al día siguiente de la conversación entre Netanyahu y Peña, Yoed Magen, embajador de Israel ante el gobierno paraguayo, publicó en su cuenta de Twitter que mantuvo una reunión con el presidente electo de Paraguay.
¿De mudanza otra vez?
«Hablamos sobre su intención de mudar la embajada paraguaya a nuestra capital Jerusalén y otros proyectos de cooperación que estrecharían aún más nuestra cooperación», escribió.
Peña recibió a Magen en su residencia en Asunción y estuvo acompañado de Lea Giménez, encargada del equipo de transición de gobierno, así como de Rubén Ramírez, ex canciller paraguayo. Junto al embajador israelí estuvo Alejandro Rubin, cónsul honorario en Paraguay.
Todo indica que la promesa electoral de Peña será cumplida apenas asuma la presidencia, lo que supondrá un importante giro geopolítico del país en cuanto a su política exterior, señalaron los comentaristas políticos en el país sudamericano.