La cuestión de la capital de Israel, Jerusalén, como sede de las embajadas extranjeras, se coló en el temario de las discusiones de campaña para las elecciones presidenciales de Paraguay, que se celebran este domingo 30 de abril.
Paraguay había mudado su embajada desde Tel Aviv a Jerusalén en mayo del 2018. El traspaso oficial contó incluso con la participación del entonces presidente paraguayo, Horacio Cartes, quien había llegado a la capital para estrenar las oficinas.
Se trató, dijo Cartes en aquel momento, en una declaración que parecía referida a Estados Unidos, de «una decisión autónoma» de las autoridades de Asunción, «sin influencia de ningún otro estado».
La representación paraguaya en el tercer piso del complejo de edificios del Jerusalem Technology Park, en la capital israelí, se mantuvo, sin embargo, durante pocos meses.
En efecto, en setiembre de ese mismo año, el nuevo gobierno de Paraguay, encabezado por el presidente Mario Abdo, quien había ganado las elecciones de abril del 2018 y asumido el poder en el mes de agosto siguiente, decidió revertir la mudanza y devolver la embajada a Tel Aviv.
Según explicó el entonces canciller del país sudamericano, Luis Alberto Castiglioni (actualmente ministro de Industria y Comercio), la decisión del gobierno de Cartes había sido «unilateral e inconsulta».
¿Una nueva mudanza?
«No tuvo ningún tipo de argumentos fundados en el derecho internacional -afirmó en aquella ocasión Castiglioni-. Fue una decisión que se comunicó sin ningún tipo de argumentación, lo cual habla de una decisión, diría yo, hasta visceral«.
El tema, aunque menor al lado de las principales preocupaciones de los paraguayos, como la corrupción o la salud, según indicó una encuesta reciente, parece haber encontrado un espacio en la discusión y las rivalidades políticas locales.
Algunos analistas afirman que, de vencer en las elecciones para suceder a Abdo, se puede esperar que el candidato Santiago Peña, del oficialista Partido Colorado, se incline por una nueva mudanza de la embajada hacia Jerusalén.
Entrevistado por una televisora de Asunción y respondiendo a una pregunta sobre las relaciones con Taiwán, Peña señaló a Israel como parte de «un triángulo geopolítico muy importante para el Paraguay».
«Tenemos mucho que aprender de Taiwán como un país pequeño al lado de un país muy grande como lo es China para ellos y Brasil para nosotros», dijo el candidato. Y, de la misma manera, «tenemos que fomentar la relación con Israel, de quien también podemos aprender», añadió.
Peña fue ministro de Hacienda del gobierno de Cartes, el presidente que ordenó la mudanza de la representación diplomática paraguaya a Jerusalén, donde apenas se mantuvo cuatro meses.
«Jerusalén, Washington y Taipei»
En cuanto a la embajada en Israel, resultó llamativo que, durante la entrevista y hablando de las relaciones con Estados Unidos y Taiwán, Peña eligió referirse a esos países por sus capitales: «Jerusalén, Washington y Taipei».
Precisamente, ese detalle fue destacado por el analista paraguayo Juan Carlos Dos Santos, quien apuntó «el hecho de mencionar a Jerusalén, a diferencia de otros actores políticos alrededor del mundo que utilizan a Tel Aviv para ubicar a la ‘capital’ israelí, a pesar que toda la sede del gobierno de ese país se encuentra en la primera».
Eso, escribió Dos Santos en una reciente columna para IsraelEconomico, «da claras muestras de la intención de Peña con relación a los pasos que seguirán las relaciones internacionales en caso de vencer en las elecciones».
Peña, en todo caso, ya había anunciado varias veces durante la campaña interna para convertirse en el candidato del partido Colorado, que la embajada paraguaya en Israel debe estar en Jerusalén, «de donde nunca tuvimos que salir», según remarcó.
Sin embargo, las cosas podrían ser distintas si vence su rival, Efraín Alegre, el aspirante a la presidencia por Concertación Nacional.
Relaciones «firmes y sólidas»
En una entrevista divulgada por la formación de centroizquierda Frente Amplio, que es parte de la Concertación Nacional, Alegre dijo que, en un eventual gobierno bajo su mando, la política exterior, incluso hacia Israel, «la va a decidir el Paraguay», porque «somos un país soberano».
«Tenemos alianzas y valoramos mucho las relaciones con los Estados Unidos, pero las decisiones la tomamos nosotros», añadió, antes de referirse también a Israel.
«Nuestra relación con Israel no depende de poner la embajada en Jerusalén, eso desde luego no tiene ningún sentido», aseguró el candidato. «Israel sabe que nosotros estamos comprometidos con ellos desde la creación del estado» y que «mantenemos esas relaciones, que son firmes y sólidas», concluyó.
Unos cinco millones de paraguayos están habilitados para ir a sufragar este próximo domingo, con Peña y Alegre concentrando el 70 por ciento de la intención de voto. Para muchas consultoras, los aspirantes se encuentran en un virtual empate técnico, que se decidirá en las urnas voto a voto.