Un grupo de estudiantes de octavo grado de una escuela israelí paseaba por la zona arqueológica de Azor, en los alrededores de Tel Aviv, cuando a su paso apareció un raro artefacto… de hace más de 3.000 años
Se trata de un escarabeo, uno de los famosos sellos con la forma de un escarabajo egipcio que también servían como amuletos.
«Estábamos dando vueltas cuando vi algo que se asemejaba a un pequeño juguete en el suelo», contó Gilad Stern, del Centro Educativo de la Autoridad de Antigüedades de Israel (AAI), quien dirigió el paseo.
«Una voz interior me dijo ‘recógelo y dalo vuelta’ -prosiguió Stern-. Me quedé asombrado: era un escarabajo con una escena claramente grabada, el sueño de todo arqueólogo aficionado. ¡Los alumnos estaban muy emocionados!».
La excursión de los chicos y chicas del octavo grado de la escuela media Rabin se llevó a cabo en el contexto de un curso de guías turísticos organizado por la AAI, que luego permite a los alumnos enseñar a los residentes de Azor su patrimonio arqueológico local.
Según explicaron los expertos de la AAI, los sellos de escarabajos son claramente egipcios, pero su amplia distribución llegó también muy lejos de las fronteras de aquel reino.
«Estábamos dando vueltas cuando vi algo que se asemejaba a un pequeño juguete en el suelo»
Por ejemplo, cientos de escarabeos fueron descubiertos en la tierra de Israel, principalmente en tumbas, pero también en capas de asentamientos. Algunos de ellos fueron importados de Egipto, muchos más eran imitados en Israel por artesanos locales bajo la influencia egipcia.
El nivel de elaboración del escarabajo hallado por los estudiantes de la escuela Rabin, indicaron los arqueólogos, no es típico de Egipto y puede representar un producto de los artesanos locales.
La figura del escarabajo egipcio está hecha de loza, un material de silicato recubierto de un esmalte verde azulado y «es posible que se haya caído de las manos de un personaje importante y de autoridad que pasara por la zona», especuló el doctor Amir Golani, especialista de la Edad de Bronce de la AAI.
«Es difícil determinar el contexto original preciso», continuó Golani, quien señaló que en la parte inferior y plana del sello aparece una figura sentada en una silla, y frente a ella otra de pie, cuyo brazo esta levantado por encima de la que está sentada.
La figura que está de pie en el «escarabajo» tiene una cabeza alargada, que aparenta representar la corona de un faraón egipcio, «y es posible que podamos ver aquí una instantánea de una escena en la cual el faraón le está confiriendo autoridad a un súbdito cananeo local», indicó el experto.
«Una voz interior me dijo ‘recógelo y dalo vuelta'», contó el guía de la excursión
Analizando la escena representada en el sello, Golani dijo que «refleja la realidad geopolítica que prevaleció en la Tierra de Canaán durante la Edad del Bronce Final (1500-1000 antes de la era cristiana), cuando los gobernantes locales vivían, y a veces se rebelaban, bajo la hegemonía» egipcia.
«Por lo tanto, es muy posible que el sello sea de la Edad del Bronce Final, cuando los cananeos locales estaban gobernados por el Imperio Egipcio», completó.
Esta no es la primera vez que arqueólogos aficionados encuentran artefactos milenarios alrededor de Israel, donde -de hecho- se trata de una situación bastante común.
Así fue que, por ejemplo, en febrero de este año un turista que paseaba por el desierto de Judea encontró los restos de una vasija de hace miles de años, mientras que, en noviembre del 2021, una niña halló una rara moneda acuñada durante los tiempos de la revuelta contra los romanos.