El famoso actor Haim Topol, conocido en todo el mundo por su protagonista en El violinista sobre el tejado, habría sido un espía part-time del Mossad, el servicio de inteligencia exterior de Israel.
Así lo aseguraron su esposa y sus hijos pocas semanas después de la muerte del actor israelí, que falleció en Tel Aviv el 8 de marzo pasado, a los 87 años.
«No sé exactamente cuál es la definición apropiada para las misiones y deberes que cumplió», reconoció dijo Omer, el hijo del actor. «Pero lo que está claro es que papá estuvo involucrado en misiones secretas en nombre del Mossad», añadió en una entrevista con el diario Haaretz.
De hecho, sus familiares recordaron durante la conversación que el actor contaba con un pequeña cámara fotográfica Minox, como las que se ven en las películas de espionajes de los años ’60 y ’70, además de una minigrabadora a casete.
También solía viajar al extranjero sin explicar las razones de la travesía, añadieron Omer, su hermana Adi y la esposa del actor, Galia, quien describió a su esposo como una persona impulsada «por la aventura y el coraje».
«No había nadie más adecuado que él para involucrarse» en asuntos de espionaje en el extranjero, «incluso en temas de los que no se habla», añadió Galia.
Espionaje en el cine, y en la vida real
Que Topol era un patriota eso nadie lo discutía. Nacido en Tel Aviv en 1935, antes de la creación del estado de Israel, Haim comenzó a coquetear con la actuación durante su servicio militar en las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).
Luego llegarían el éxito nacional y la enorme repercusión en el extranjero gracias a El violinista en el tejado, primero en el teatro y luego en la adaptación cinematográfica de Norman Jewison de 1971 que le hizo ganar renombre a nivel internacional.
Una de esas temporadas teatrales, en Londres, coincidió con el preámbulo de la Guerra de los Seis Días, en 1967. Cuentan las historias que ,cuando estalló el conflicto, Topol se «escapó» de la capital británica para ir a combatir como reservista en Israel.
Curiosamente, el actor israelí participó de una popular película de la saga de James Bond, For Your Eyes Only (1981), compartiendo cartel con el entonces intérprete del célebre agente británico, el inglés Roger Moore.
En el filme, Topol encarnó a Milos Columbo, un contrabandista que pasa de ser socio del villano Aristotle Kristatos (interpretado por Julian Glover) a aliado de James Bond.
Una fachada inofensiva
Al parecer, también en la vida real Topol circuló por el escenario del espionaje internacional. Hablando con Haaretz, su esposa y sus hijos revelaron que el contacto del actor para las misiones era uno de sus mejores amigos, el entonces alto funcionario del Mossad Peter Zvi Malkin.
El agente, aseguraron, solía visitar la casa de los Topol entrando de manera sigilosa y en secreto a través del patio trasero, para evitar conexiones públicas entre el servicio de inteligencia y la vida privada del actor.
Malkin, por su parte, es recordado como uno de los cuatro agentes que secuestraron al jerarca nazi Adolf Eichmann en Argentina en 1960 para llevarlo a Jerusalén para ser juzgado y luego ejecutado.
Según la prensa israelí, Malkin había formado una unidad especial para vigilar los movimientos de aerolíneas extranjeras, aeropuertos y embajadas de países enemigos en otras naciones, una labor para la cual Topol funcionaba perfectamente como inofensiva fachada.
Topol viajaba a Londres, donde la familia contaba con un apartamento, «y vivía con nosotros cuando lo necesitaba», dijo Adi.
Una red de anticuarios europeos
«Mi padre -agregó la hija del actor- ayudaba a Zvi con todo tipo de cosas que quería verificar», como puntos de acceso y sistemas de seguridad en edificios o instalaciones que pudieran interesar al Mossad.
Gracias a su fama internacional, a Topol no le costaba hacerse amigos de personalidades extranjeras.
Por ejemplo, varios generales egipcios a los que conoció durante el proceso que llevó a los tratados de paz de 1979 y a los que luego invitaría periódicamente a cenar en su casa de Tel Aviv.
El abogado Uri Slonim, quien actuó como representante israelí en negociaciones para conseguir información sobre soldados desaparecidos durante la Guerra del Líbano, contó que Topol también prestó importante ayuda en ese frente.
Slonim dijo que el actor tenía una amplia red de conexiones con anticuarios europeos que hacían negocios con funcionarios del gobierno y del ejército de Siria, un país indispensable para saber lo que ocurre en territorio libanés.