Purim es la ocasión para recordar el milagro relatado en el Libro de Ester y destacar que siempre puede haber lugar para la alegría, como muestran estas fotografías vintage de Israel en el siglo pasado.
En el 2021, en medio de la pandemia de coronavirus, las celebraciones se llevaron a cabo entre el 25 y el 26 de febrero. Las autoridades israelíes pidieron a los ciudadanos mesura en las fiestas, precisamente a causa de los efectos del COVID-19.

El gobierno decretó un toque de queda para jueves, viernes y sábados por la noche, a partir de las 20.30 y hasta las 5 de la mañana.
Como todos saben, Purim recuerda la historia de la reina Ester, la joven judía que se convirtió, a su pesar, en mujer del rey persa Asuero, en el siglo IV antes de la era cristiana.

Junto a Ester y Asuero, los otros dos personajes fundamentales de esta historia son Mordejai, el tío que crio a la joven huérfana como su fuera su propia hija, y el malvado primer ministro Haman, quien convenció al rey con su plan para eliminar a los hebreos.
Enterados de los planes de Haman, Mordejai y Ester urdieron un plan. Primero, los hebreos ayunarían durante tres días, y luego, a través de una serie de intrigas palaciegas -que incluyeron una orden de Haman para ejecutar a Mordejai- el temible primer ministro terminó ahorcado.

En algún momento de la historia judía, esos terribles momentos -que llevaron también a la muerte de los hijos de Haman a manos de los enfurecidos hebreos- terminaron siendo conmemorados con un alegre carnaval que recuerda el milagro de aquel tiempo en el reino persa.
Hoy, esos festejos estarán contenidos por los protocolos de seguridad impuestos a causa del coronavirus. Pero ello no impedirá recordar el milagro, tal como se pudo ver en muchos mensajes en las redes sociales.


Por ejemplo, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, escribió en su cuenta de Twitter: «Purim nos recuerda la resistencia y el coraje del pueblo judío».
«Y aunque no podremos reunirnos este año y celebrar estas felices fiestas en persona, quiero desearles a todos un Purim muy feliz», añadió Trudeau.

Este fin de semana, destacó por su lado el ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, los judíos en todo el mundo conmemoran Purim, «una festividad de 2000 años que celebra el regalo de la vida».
Mirando la situación actual con una sonrisa, el mensaje concluyó: «¿La mejor parte? Gracias a la costumbre de llevar máscaras (en Purim), ni siquiera el COVID puede interponerse» en los festejos.