El Dragón, el vehículo de combate sobre ruedas (VCR) 8×8 con el que las fuerzas armadas de España modernizarán al ejército, ya empezó a ser producido a fines del 2021 por GDELS (General Dynamics European Land Systems) en su planta en la región de Asturias
Del desarrollo del VCR también participa la española TESS y ahora se sumó Plasan, que tiene su base en el kibutz Sasa, en el norte de Israel.
Según se informó a principios de este mes de febrero, el contrato se firmó en noviembre del año pasado y «cubre los primeros 348 vehículos Dragón» que se están fabricando en la localidad de Trubia, en los alrededores de Oviedo.
En el marco del contrato, Plasan suministrará su sistema de protección contra disparos de proyectiles RPG, conocido como Hybrid Slat Fence (HSF), y su dispositivo contra explosiones de minas con sus correspondientes asientos de absorción de energía que resguardan a los tripulantes del blindado.
Las entregas, añadieron desde la empresa israelí, comenzaron en enero de este año y continuarán hasta el 2026.
El contrato, dijo Dan Ziv, el CEO de Plasan, representa «hito importante en los esfuerzos» de la firma israelí para el sector de los VCR y «una prueba notable» de su «capacidad única» para «adaptar su tecnología y soluciones a las necesidades específicas de la plataforma y del cliente».
«Plasan se enorgullece de participar en este prestigioso programa del Ministerio de Defensa español y continuará trabajando en estrecha colaboración con Tess para garantizar la implementación exitosa» del proyecto, completó Ziv.
Las autoridades españolas de defensa adjudicaron el contrato de fabricación de los Dragón a GDELS en agosto del 2020, por un valor aproximado de 1.740 millones de euros (unos 2.060 millones de dólares), recordó el website Army Technology.
Por su parte, la publicación Army Recognition destacó que el VCR Dragón se basa en el Piranha V, diseñado y fabricado por la empresa suiza MOWAG, que ahora es una subdivisión de GDELS.