La compañía de defensa Israel Aerospace Industries (IAI) anunció esta semana que concluyó con éxito una serie de pruebas con el misil BARAK ER, en este caso en una versión capaz de interceptar amenazas en un rango de hasta 150 kilómetros de distancia
Según explicaron desde IAI, la capacidad de alcance extendido se hizo posible en parte ajustando las aptitudes del interceptor y del radar a un alcance de 150 kilómetros. Además, el misil lanzado verticalmente incluye un propulsor, un motor de cohete de doble pulso y un buscador de radar avanzado.

«La evolución de las amenazas aéreas en todo el mundo, combinada con los cambios geopolíticos, requiere un sistema de defensa avanzado, ágil y versátil», señaló Boaz Levy, presidente y director ejecutivo de IAI.
Levy recordó que el sistema BARAK ya fue probado operacionalmente contra «innumerables amenazas», incluidas «algunas de las más desafiantes en la actualidad». La serie de prueba que se acaba de completar, aseguró, «mejora las capacidades probadas» del sistema de misiles, «contra una gama más amplia de amenazas».
El presidente de IAI afirmó además que «la combinación de varios interceptores en un lanzador unificado y la modularidad inherente del sistema BARAK proporcionan una respuesta óptima para el futuro campo de batalla», ofreciendo a las fuerzas armadas «una agilidad y flexibilidad operativa sin precedentes».