La Fuerza Aérea de Israel (FAI) reveló algunos detalles del trabajo de los controladores de vuelo durante la impactante operación contra los túneles del grupo radical islámico Hamas en la Franja de Gaza, que involucró la acción de nada menos que 160 aviones de combate
Para los analistas y técnicos de la Unidad de Control Regional Sur, que gestionaron el despliegue de los aviones, se trató de un verdadero «momento de la verdad», ya que existe una gran diferencia entre las operaciones de rutina y las de combate, explicó un artículo del website de la FAI.
En los períodos de rutina, explicó el teniente Y., cuyo nombre completo se mantiene en el anonimato por razones de seguridad, «todo el espacio aéreo israelí se divide en secciones de entrenamiento y las formaciones (de aviones de combate) no suelen estar relacionadas entre sí».
Durante la operación, en cambio, «nos enfocamos en un área muy específica y muchos de los vuelos fueron realizados por varias formaciones que cooperaron entre ellas, lo que requirió una coordinación sistemática«, añadió el oficial.
160 aviones participaron de la operación contra el sistema de túneles de Hamas
Según la autora del artículo, Gal Camrass, uno de los eventos que mejor demostró la diferencia entre el espacio aéreo en tiempos de rutina y durante una gran operación fue precisamente el ataque al sistema de túneles de Hamas, que el grupo utiliza para almacenar explosivos y mover tropas.
Fueron 160 los aviones que el 14 de mayo partieron para un ataque conjunto en un área muy pequeña, «lo que requirió una precisión extrema y una coordinación cuidadosa», apuntó Camrass.
«Una vez que descubrimos el tamaño de la misión, comprendimos que íbamos a participar en algo muy significativo», afirmó por su parte el mayor D., también de la Unidad de Control de la región sureña.
«Había pasado por simulaciones a gran escala antes, pero esto, con las imágenes en los controles llenas de aviones, fue otra cosa«, reconoció el oficial.
Otro oficial de la Unidad, el mayor B., añadió que la misión «ilustró perfectamente la importancia del control aéreo», que permite «colocar una gran cantidad de aviones en un espacio aéreo tan estrecho» y «garantizar su seguridad y eficiencia».
«Un espacio aéreo perfectamente sincronizado y coordinado»
Aquel viernes, los aviones «despegaron desde diferentes lugares, volando en diferentes direcciones hasta acercarse al área del ataque de manera organizada», prosiguió.
De acuerdo con el relato del mayor B., los controladores «planificaron las rutas de vuelo y las altitudes de manera de crear un espacio aéreo perfectamente sincronizado y coordinado» para las incursiones.
חיל-האוויר תקף הלילה עשרות מטרות טרור ברצועת עזה.
— Israeli Air Force (@IAFsite) May 15, 2021
בין המטרות שהותקפו: מספר רב של עמדות שיגור רקטות ומשגרים תת קרקעיים, חוליות מחבלים, פיר מנהרה של חמאס, דירות מבצעיות של פעילי הכוח הימי של חמאס, משרדו המבצעי של ראש מנגנוני הביטחון של חמאס, מספר מחסני אמל"ח משמעותיים, ועוד. pic.twitter.com/D1xFvG91Pf
Citado en el artículo de la FAI, el teniente A. resumió el pensamiento de sus colegas al afirmar que el raid sobre el sistema de túneles de Hamas «fue la misión más compleja» de la campaña Guardián de las Murallas contra el grupo fundamentalista.
Hubo «muchas variables a tener en cuenta en cada momento», continuó el teniente. «Se nos exigió identificar y confirmar los objetivos para cada aeronave» lo que reclamó, dijo, «una gran disciplina en las líneas de comunicación».
Al mismo tiempo, añadió, los operadores de drones trabajaron a toda velocidad para proporcionar imágenes en tiempo real de cada blanco, con el objetivo de brindar a los pilotos la información necesaria para evitar dañar a los civiles.
«Nos dijeron que este sería un evento histórico, y así fue», contó el sargento primero Omer, quien también estuvo destacado en la Unidad de Control. «La gestión del espacio aéreo -subrayó- es clave para el éxito de una misión».
«Nos dijeron que este iba a a ser un evento histórico»
El sargento apuntó además que fue «un evento complejo e intenso», comenzando por el desafío de «trabajar con docenas de formaciones» de aeronaves. «Pero cuando finalizó la misión, comprendimos el significado de lo que acabábamos de hacer», aseguró.
Al completarse el operativo, concluyó el mayor D., «la sensación al salir del búnker, después de ver el impacto de nuestro trabajo y entender su importancia para defender a los ciudadanos de nuestro país, fue difícil de describir».