El Ministerio de Defensa de la República Checa anunció esta semana la adquisición de baterías de misiles tierra-aire SPYDER, desarrollados en Israel, para reemplazar sus viejos sistemas de defensa aérea de la era soviética
Se trata de una compra por unos 630 millones de dólares, según precisó la prensa especializada en temas de armamentos.
En una declaración pública, el ministro de Defensa checo, Lubomir Metnar, dijo que su país buscaba «un sistema moderno y de vanguardia para poder proteger mejor nuestro espacio aéreo e infraestructura clave».

«Y nadie tiene más experiencia con la defensa aérea que Israel», aseguró el funcionario del gobierno de Praga.
«Nadie tiene más experiencia en defensa aérea que Israel», dijeron desde Praga
Después de evaluar otras opciones, indicaron las autoridades del país europeo, «el sistema israelí SPYDER resultó ser el más eficaz».
«Se trata de una solución hecha a medida de nuestras necesidades, compatible con los estándares de la OTAN y con la participación de la industria checa», completó el reporte.
Metnar, por su parte, agradeció «la voluntad del gobierno israelí de compartir con nosotros un sistema de defensa de vanguardia que moverá a nuestras fuerzas armadas hacia las capacidades del siglo XXI».
«Finalmente, nos libraremos de nuestra dependencia de los sistemas Kub soviéticos de la década de 1970, que no cumplen con los requisitos actuales», resumió el ministro.
Los SPYDER, desarrollados por Rafael Advanced Defense Systems con la participación de Israel Aerospace Industries, son sistemas de protección aérea de corta y media distancia.
El ministerio de Defensa checo considera a Israel uno de sus «socios más cercanos»
Según explican desde Rafael, las baterías están preparadas para proteger «zonas grandes» y fuerzas militares contra «una amplia gama de amenazas», entre ellas ataques de aviones, helicópteros y bombarderos, así como drones.
Como parte del acuerdo, se estableció que la industria checa participará de la producción de las baterías, proveyendo partes y servicios por valor de más del 30 por ciento del valor de la operación.

También trascendió que, con estas adquisiciones, la República Checa espera cubrir sus necesidades en este frente por al menos veinte años.
Las negociaciones para la adquisición de los sistemas SPYDER entre los gobiernos de Praga y Jerusalén se concretaron en setiembre del año pasado, cuando el gobierno checo anunció su decisión de adquirir el sistema israelí.
En julio de este año, el ministro Metnar visitó Israel, precisamente para avanzar con las tratativas para la compra de los sistemas de defensa aérea.
La visita, señaló en aquel momento un comunicado del ministerio checo de Defensa, «confirma que Israel se encuentra entre nuestros socios más cercanos«.