Apenas horas después de que el gigante de la informática Microsoft alertara sobre una célula de hackers iraníes actuando contra objetivos en Israel y en Estados Unidos, un hospital en Hadera, en el norte del país, fue alcanzado por un duro ciberataque
El ataque contra el centro médico Hillel Yaffe hizo blanco en el sistema informático del hospital, desactivando el miércoles sus computadoras, que seguían todavía fuera de servicio el jueves.
Las autoridades israelíes señalaron que lanzaron una investigación criminal sobre el caso, y prefirieron no arriesgan hipótesis sobre su origen.
Se trataría, se informó, de un ataque tipo «ransomware», cuando los hackers se «apoderan» del sistema informático y lo «liberan» a cambio de un rescate.
Expertos y equipos de la Autoridad Nacional de Seguridad Cibernética fueron enviados rápidamente a Hadera para «restaurar los sistemas informáticos del hospital, para que funcionen completamente lo más rápido posible».
De hecho, el hospital logró organizarse para seguir brindando servicios de emergencia. Pero tanto el centro médico de Hadera como los del resto del país fueron puestos en alerta ante la posibilidad de nuevos ataques.
El martes de esta semana, Microsoft difundió un comunicado en el que advirtió sobre una célula de hackers iraníes, identificada como «DEV-03432», que estuvo atacando blancos online de Estados Unidos, Israel y otros países en el Medio Oriente.
Según los técnicos de la empresa norteamericana, los piratas informáticos de Teherán llevaron a cabo ataques del tipo «password spraying», es decir, probando una contraseña de uso común tras otra hasta obtener acceso a un grupo de usuarios.
Los blancos fueron empresas navieras de la región, y firmas de defensa y financieras estadounidenses e israelíes, se informó.