El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, advirtió este lunes que el país «responderá con gran fuerza» a los cohetes lanzados en los últimos días desde la Franja de Gaza contra Jerusalén y el sur del territorio nacional
Hablando durante una ceremonia que formó parte de los festejos por el Día de Jerusalén, Netanyahu dijo que el grupo extremista islámico Hamas, que controla Gaza, «cruzó una línea roja» al atacar la capital israelí.
«Israel responderá con gran fuerza», aseveró el primer ministro. «No toleraremos ataques contra nuestro territorio, nuestra capital, nuestros ciudadanos y nuestros soldados» y «quien nos ataque pagará un precio muy alto», añadió.

Varios cohetes fueron lanzados en los últimos días desde el territorio palestino contra Israel, incluyendo varios dirigidos contra la capital, en el marco de los serios disturbios que vienen agitando Jerusalén.
También el presidente de Israel, Reuven Rivlin, alertó sobre las consecuencias de las agresiones. «No permitiremos que nadie interrumpa nuestra vida diaria, no nos doblegaremos ante ninguna amenaza», afirmó.
Rivlin aseguró que «quien busque poner a prueba nuestra capacidad de recuperación encontrará un muro defensivo, un puño de hierro».
«Que nadie desafíe el poder letal de nuestras fuerzas, no las pongan a prueba», sugirió el presidente.

Este lunes al anochecer, el gobierno, la población y las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) se encontraban en estado de alerta, mientras se espera ver cómo se desarrollan los acontecimientos. Por ahora, las FDI bombardearon varias posiciones de Hamas en Gaza, matando a entre ocho y once militantes, según los distintos reportes.
Las fuerzas de seguridad recomendaron a la población que, mientras dure el alerta, no se congreguen en grupos de más treinta personas y también se ordenó el cierre de escuelas y negocios que no cuenten con apropiados refugios anti-cohetes.