Un niño israelí de 7 años, enfermo de cáncer, cumplió su sueño de conocer a los soldados del escuadrón 916 de la Armada, que tiene su base en Ashdod, en el sur del país, gracias a un programa del Magen David Adom (MDA)
Yotam Cohen tenía solamente tres años cuando recibió el regalo de un primer sueño cumplido por parte del MDA: un recorrido del sur de Israel a bordo de un helicóptero-ambulancia (Medevac).
«Lamentablemente, el raro cáncer de Yotam regresó por tercera vez», señalaron desde el servicio nacional de emergencias israelí. Así fue que, una vez más, llegó el momento de levantar los ánimos del pequeño.
«Me divertí mucho y, ahora, quiero ser capitán», dijo Yotam
Como Yotam quería agradecer a sus héroes por haber protegido la zona donde reside durante el reciente enfrentamiento con grupos radicales islámicos de la Franja de Gaza, el MDA lo llevó a conocer la base de Ashdod.
Después del recorrido en ambulancia desde su casa hasta la base, el niño recibió una gorra del escuadrón y se subió, literalmente, a la silla del capitán en uno de los botes patrulleros de la Armada.
«Me divertí mucho y ahora quiero ser capitán», dijo Yotam, quien ahora pasa todo el día en su casa envuelto «en la bandera que recibí de los soldados, como Superman».
En sus cuentas en las redes sociales, el MDA señaló que durante este evento también se celebró el estreno de una nueva ambulancia, la cual -adelantaron- será utilizada en el futuro en otros «deseos cumplidos» para niños del país.
Los paramédicos agradecieron a la Armada por participar de esta «misión especial»
«Nos entristeció mucho saber que Yotam estaba enfermo de nuevo», admitió Yonat Daskal-Dagan, una de las paramédicas que acompañó al pequeño en el recorrido.
Por eso, continuó, «creamos un día especial para poner una sonrisa en su rostro, al menos por unos momentos». Yonat agradeció a la Armada «por sumarse a la misión especial y le deseamos una recuperación completa y buena salud» al nuevo «capitán».
Precisamente, como parte del día especial, Yotam se reunió con «el otro» capitán del barco, con los soldados y otros oficiales de la marina, recibió una explicación sobre el funcionamiento de la lancha y hasta lo pudo conducir durante unos breves minutos.
«Estamos muy, muy emocionados y felices de que hayas venido a navegar con nosotros», le dijo el capitán Peleg a Yotam. «Los niños como tu y sus familias nos dan la fuerza para seguir adelante», le aseguró.
«La experiencia fue asombrosa», señaló por su lado la madre de Yotam, Ravit. «Los soldados nos abrazaron y fueron cordiales y prepararon obsequios especiales» para el niño, que «estaba feliz y emocionado».
Cuando volvió a a casa, «les contó a todos que conoció en la base y sobre la experiencia» a bordo de la lancha, completó Ravit.