Ahora que el conflicto de mayo del 2021 con Hamas parece haber quedado atrás, es una buena oportunidad para observar con calma algunos elementos importantes del enfrentamiento, en este caso, los potentes raids de la Fuerza Aérea de Israel (FAI) contra blancos del grupo islámico en la Franja de Gaza
La propia FAI ofreció algunos detalles de los complejos preparativos que quedan detrás de cada una de esas incursiones.
Cuando se piensa en alguno de esos raids, «la primera imagen que viene a la mente es la de un avión a alta velocidad volando por el cielo, completamente cargado con municiones altamente avanzadas», a cargo de una intrépida y bien preparada tripulación, señaló la FAI en su website.
«Sin embargo, en lo que no siempre se piensa de inmediato es en la increíble atención a los detalles al planificar y llevar a cabo cada misión. ¿Cómo saben los miembros de la tripulación exactamente dónde y cuándo atacar?«, se pregunta la reportera militar Aya Ingel en el artículo.
Para empezar, al llevar a cabo una incursión aérea, en especial en la densamente poblada Franja de Gaza, «la prioridad principal es neutralizar el objetivo, mientras se evita dañar a hombres, mujeres y niños no involucrados», señala Ingel.
Una entera división se encarga de seleccionar los proyectiles adecuados
Entre las claves para preparar a los pilotos para sus misiones se destaca, en ese sentido, una meticulosa recopilación de datos de inteligencia.
«Una vez que se declara objetivo, comienza un proceso de inteligencia detallado e intrincado» que incluye preguntas como «¿viven civiles en las proximidades? ¿El objetivo se encuentra cerca de una escuela o una mezquita?», señala la FAI.
«Estos detalles son recopilados por organismos de inteligencia y transferidos a la FAI, que luego crea un plan operativo, precisan.
Ya en el terreno más «técnico», la organización del raid pasa a los encargados de diseñar el poder de fuego para atacar cada blanco específico, que puede ser un cuartel de Hamas, la red de túneles en Gaza o fábricas y depósitos de cohetes y municiones.
Existe una entera división en la infraestructura de la FAI que «se enfoca en la planificación de objetivos, y su propósito es proporcionar una ubicación exacta para que las municiones alcancen para que el ataque sea efectivo», señala el reporte de la Fuerza Aérea.
Los oficiales de esta división «seleccionan las municiones ideales que maximizarán la efectividad del ataque, mientras minimizan el daño a los civiles y la propiedad circundante», añade el informe.
Luego, continua, «deciden los ángulos específicos en los que se desplegarán las municiones» y «producen una ubicación definida que deja poco o ningún margen de error» en la incursión.
Según Ingel, el blanco «es revisado por varios miembros del personal antes de la aprobación final» para el ataque con los jets de la FAI.
El control pasa a la sala de mando
Una vez que se seleccionó el escuadrón de la Fuerza Aérea que estará a cargo del operativo y el número de aviones que llevarán a cabo la incursión, se activa la sala de mando, adonde oficiales y expertos seguirán de cerca el raid a través de sofisticadas tecnologías y grandes paneles y pantallas.
Con la información producida por drones, helicópteros y los propios aviones de combate, más de quince soldados y oficiales se sientan en la sala de mando «con una enorme responsabilidad sobre sus hombros: dan la aprobación final al ataque», dicen desde la FAI.
תיעוד נוסף וקולות קשר מסיכול חוליית פעילי הנ"ט החמושה מוקדם יותר היום בזמן שנסעו ברכב בצפון רצועת עזה, בפעילות משותפת של חיל-האוויר והשב"כ. pic.twitter.com/pOPOpayxlD
— Israeli Air Force (@IAFsite) May 20, 2021
Ellos «deben evaluar cuidadosamente los objetivos y asegurarse una vez más de que ningún civil no involucrado resulte herido», escribe la reportera militar.
A medida que se acerca el golpe contra el blanco elegido, «aumenta el ritmo de trabajo en la sala de mando», describe Ingel. En el artículo, la reportera contó que tuvo la oportunidad de presenciar la actividad en la sala durante uno de los raids del reciente conflicto con Hamas.
«Hay un problema: los operadores identifican a civiles en las cercanías del lanzador» de cohetes
En esa ocasión, los jets israelíes alcanzaron el primer blanco y continuaron su vuelo hacia el siguiente. «Dos objetivos más son alcanzados con éxito sin causar daño a los civiles no involucrados», destacó.
Pero, cuando los drones señalan el cuarto objetivo, «hay un problema: los operadores identifican a civiles en las cercanías del lanzador» de cohetes de Hamas que los aviones israelíes se aprestaban a atacar.
«Las palabras ‘abortar misión’ se escuchan inmediatamente en el sistema de comunicación» con los aviones de la FAI, sigue el relato. «El peligroso lanzacohetes, que se espera que dispare al centro de Israel en solo unas horas, está tan cerca de ser destruido» pero hay que cambiar de planes, señala.
En el momento en que civiles entran en escena, aseguran en la FAI, la sala de mando «hará todo lo que esté a su alcance para detener el ataque». Y solamente una vez que se despeja el área, «el avión de combate se acercará al objetivo nuevamente», resume el informe.
Los aviones de combate de la Fuerza Aérea volverán a casa, y en la sala de mando tendrán un descanso. Hasta que sea necesario volver a golpear.