El presidente y el primer ministro de Israel, Itzjak Herzog y Naftali Bennett, recibieron este lunes en Jerusalén a los campeones olímpicos de Tokio 2020, quienes «inspiraron a las futuras generaciones» de deportistas
A la reunión, organizada en la casa presidencial en la capital, llegaron las principales estrellas de la delegación israelí que viajó a los juegos de la capital japonesa, entre ellos los gimnastas Linoy Ashram y Artem Dolgopyat, quienes lograron históricas medallas de oro.
También estuvieron la joven Avishag Semberg, la sorpresa israelí de estos juegos con su medalla de bronce en taekwondo, y el equipo de judo, que subió al tercer lugar del podio, gracias a su desempeño en los combates mixtos.
Hasta Jerusalén llegó también Nicol Zelikman, quien quedó séptima en la final de gimnasia rítmica que ganó Ashram.
«A Linoy, Artem, el equipo de judo, Avishag y todos los atletas, los que dieron todo, los que estaban tan cerca (de las medallas) y los que dieron toda su alma: en nombre del pueblo de Israel Ies doy las gracias», dijo el presidente.
«Gracias a nuestras estrellas, son nuestros héroes», dijo el presidente Herzog
Herzog destacó «la inspiración a las generaciones futuras y a toda nuestra gente».
«Gracias a nuestras estrellas, son nuestros héroes y estamos muy orgullosos de ustedes», completó.
Bennett, por su lado, se dirigió a «los que regresaron sin medalla», quienes «posiblemente recibieron menos atención pero no merecen menos agradecimiento«.
«El largo camino que recorrieron desde que eran niños, con las largas horas de entrenamiento, y el mensaje que han enviado a los jóvenes de Israel de lo que pueden hacer si se esfuerzan, eso es lo principal y por eso estamos agradecido», completó el primer ministro.
Con las cuatro medallas, los de Tokio 2020 fueron los mejores juegos olímpicos en la historia del deporte israelí.