La ceremonia de la llegada a la edad de la madurez y de la responsabilidad frente a la comunidad tiene una historia de siglos para los varones judíos. Pero para las mujeres es relativamente reciente y, en Estados Unidos, el primer bat mitzvá se oficiaba hace «apenas» cien años
Judith Kaplan, hija del influyente rabino Mordechai Kaplan, se convirtió el 18 de marzo de 1922 en la primera mujer en celebrar públicamente la tradicional ceremonia judía de mayoría de edad en Estados Unidos.
Porque llegar a bat mitzvá, «hija de los mandamientos», en hebreo, significa que una mujer joven ha alcanzado, a los 12 años, la edad adulta frente a su comunidad.
El rabino Kaplan, nacido en 1881 en Svencionys, en Lituania, se mudó a los 8 años, junto a su familia, a Estados Unidos, donde se transformaría en uno de los pensadores judíos más destacados.
Su primer libro importante, «El judaísmo como civilización», de 1934, «contenía una crítica detallada de los movimientos judíos existentes y un llamado a la ‘reconstrucción'» de la vida comunitaria, recuerda Robert Seltzer en un artículo para My Jewish Learning.
El impacto de ese libro llevó a Kaplan «y a sus asociados a publicar, al año siguiente, The Reconstructionist, una revista de temas judíos que ha tenido un impacto considerable en el liderazgo de los judíos estadounidenses no ortodoxos», añadió.
El bat mitzvá de Judith «provocó una revolución de igualitarismo e inclusión en la vida judía»
Desde entonces, el «reconstruccionismo» se instaló como una importante rama del judaísmo moderno, apoyando al sionismo y a la unidad religiosa pero, también, criticando a ortodoxos y conservadores por, a su juicio, seguir «demasiado ligados a los métodos y contenidos tradicionales de la halajá» y «no responder adecuadamente a las nuevas condiciones y necesidades».
En ese contexto llegó el bat mitzvá de Judith, quien luego fue una reconocida musicóloga y teóloga norteamericana y una figura siempre importante en la comunidad judía estadounidense hasta su fallecimiento, en 1996.
Su bat mitzvá, aseguró un artículo del periódico Jewish Boston, «provocó una revolución de igualitarismo e inclusión en la vida judía».
«A medida que un número cada vez mayor de niñas ascendía a la bimá», la plataforma donde se lee la Torá, «las niñas y las mujeres comenzaron a esperar, incluso a exigir, acceso a los honores rituales y al liderazgo de la sinagoga», señaló Jewish Boston.
Ellas, continuó, «comenzaron a soñar que podían tener la misma voz que los varones en su comunidad y más allá».
La ceremonia del bat mitzvá sigue siendo exclusiva de los sectores conservadores más liberales y los reformistas entre las comunidades judías, y no es aceptada por los sectores ultraortodoxos.
Sin embargo, es ya una institución sólida alrededor del mundo y también en Israel, adonde muchas chicas judías viajan para celebrarlo en la sección igualitaria del Muro de los Lamentos, en Jerusalén.
Las controversias, sin embargo, siguen vigentes desde la ceremonia de Judith Kaplan, a quien «no se le dio el honor de ser llamada para leer la Torá, parte de la rutina de los niños bar mitzvá», recordó Lisa Fishbayn Joffe.
El bat mitzvá, «en diversas formas, se ha generalizado en todos los movimientos dentro del judaísmo»
Lisa, directora del Instituto Hadassah de la Universidad de Brandeis, en Estados Unidos, destacó que, en cambio, Judith «habló después de que el servicio había concluido formalmente, recitando oraciones y leyendo pasajes bíblicos de un libro».
In today's morning news brief — @GabbyGiffords' bat mitzvah, inside the White House Hanukkah party, Facebook allows Holocaust denialism, and much more.
— The Forward (@jdforward) December 2, 2021
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«Incluso hoy en día -sigue la experta-, las niñas bat mitzvá en algunas comunidades leen pasajes de los textos sagrados después de los servicios del viernes por la noche o el sábado por la mañana, en lugar de hacerlo durante el servicio habitual» sabatino.
«Pero el ritual del bat mitzvá, en diversas formas, se ha generalizado en todos los movimientos dentro del judaísmo«, asegura.
«Se practica ampliamente en las comunidades reformistas, conservadoras y reconstruccionistas, una rama del judaísmo progresista fundada por el padre de Judith y cada vez más popular en el mundo ortodoxo», completó Fishbayn Joffe en un artículo para The Conversation.
Judith, por su parte, llegó a realizar un segundo bat mitzvá cuando era ya anciana, en una ceremonia de la que participaron también otras prominentes mujeres judías estadounidenses, como Betty Friedan y Letty Cottin Pogrebin.
En diciembre del 2021, la ex congresista estadounidense Gabby Giffords, conocida por haber sobrevivido a un ataque a balazos en el 2011 y su militancia contra las armas de fuego, celebró su bat mitzvá en una sinagoga de Tucson, en Arizona, a los 51 años de edad.