Adidas anunció que 152 millones de dólares generados por la venta de zapatillas Yeezy, una colección que lanzó en colaboración con el cantante estadounidense Kanye West -envuelto en escándalos de antisemitismo-, serán para organizaciones que luchan contra el odio racial.
De hecho, fueron esas controversias las que llevaron al gigante de la indumentaria deportiva a cortar relaciones con el rapero norteamericano a fines del 2022.
En un comunicado difundido en octubre de ese año, la firma alemana dijo que «no tolera el antisemitismo ni ningún otro tipo de discurso de odio» y afirmó que las «declaraciones y acciones» del cantante eran «inaceptables, odiosas y peligrosas».
West, también conocido con el nombre artístico Ye y por sus comportamientos erráticos, había hecho acusaciones conspiranoides contra los judíos. Luego, durante una entrevista radial en diciembre del 2022, dijo que «amaba» a los judíos pero «también a Hitler».
«Veo cosas buenas sobre Hitler –deliró West durante la nota-. Todos los seres humanos tienen algo de valor que pusieron sobre la mesa».
«Todos miran a Kanye»
Adidas había apostado fuerte por su colaboración con West, esperando que las zapatillas encontraran un mercado en el enorme segmento de seguidores con el que contaba en ese momento el rapero.
Sin embargo, a la sombra de las declaraciones antisemitas del músico y la suspensión del proyecto conjunto, Adidas registró pérdidas por primera vez en 30 años «y todos miran a Kanye West», según apuntó la prensa económica.
La empresa de calzado e indumentaria deportiva registró en el 2023 un resultado negativo de 82 millones de dólares, y «la ruptura de su lazo comercial con Kanye West tuvo mucho que ver», añadió el análisis.
«Aunque no fue lo suficientemente bueno, 2023 terminó mejor de lo que esperaba a principios de año», aseguró Bjorn Gulden, consejero delegado de la compañía. «A pesar de perder muchos ingresos de Yeezy y de una estrategia de venta muy conservadora», Adidas logró tener ingresos estables, indicó.
Para recuperarse de esta debacle, Adidas decidió, entre otra medidas, donar por lo menos 150 millones de dólares originados en las ventas de las zapatillas Yeezy a organizaciones que combaten el odio, la discriminación racial y el antisemitismo.
Adidas, reportó la Associated Press al dar la noticia, tenía 1.300 millones de dólares «en populares zapatillas Yeezy apiladas en almacenes después de que rompió su asociación con Ye en octubre del 2022 por sus comentarios antisemitas».
Vendiendo lotes de Yezzy
La empresa, añadió el informe, decidió vender parte de los calzados en lotes, con dos lanzamientos el año pasado y otro a fines de febrero, y «donar una parte de las ganancias a grupos contra el odio».
Según la agencia estadounidense de noticias, la empresa ya concretó donaciones a la Liga Antidifamación y al Instituto Philonise & Keeta Floyd para el Cambio Social, dirigido por familiares de George Floyd.
Puntualmente, de los 300 millones de euros de beneficio que obtuvo por las ventas de las zapatillas Yeezy en el 2023, Adidas dijo que donó o planeaba donar más de 140 millones de euros (unos 152 millones de dólares).