Una de las empresas que participa del proyecto para renovar la zona de la vieja estación central de autobuses de Tel Aviv anunció que ya comenzaron las tareas de demolición de edificios en los alrededores del mítico espacio, que fue un corazón de la ciudad hasta 1993.
La estación se inauguró en 1941 y funcionó durante cincuenta y dos años, hasta que se abrió el nuevo complejo de autobuses (actualmente en medio de un controvertido proceso de reurbanización). Luego, las estructuras terminaron de ser demolidas en el 2009.
El martes de esta semana, la firma Levinstein Properties, socia en los principales derechos de construcción de la antigua estación, notificó a la Bolsa de Valores de Tel Aviv (TASE) que recibió un primer permiso para demoler edificios en el área.
A través de una publicación en sus redes sociales, la compañía dijo que las tareas de demolición ya empezaron en uno de los grandes edificios de la zona y que espera poder comenzar a hacer lo mismo con las estructuras principales «muy pronto».
Al comentar la noticia, el diario económico israelí Globes recordó que los planes para esta verdadera revolución urbana en esta histórica zona se aprobaron en el 2011, y que Levinstein Properties y Shikun & Binui Holdings adquirieron conjuntamente más del 70 por ciento del terreno en el 2015.
En el 2017, continuó el reporte, se aprobó el plan para el Complejo Shomron», que incluirá 1.300 apartamentos y 153.000 metros cuadrados de espacio comercial y de oficinas en 20 acres de terreno entre las calles Menahem Begin, Hagdud Ha’Ivri, Hanegev y Salomon.
Se estima que los terrenos tienen actualmente un valor de casi 190 millones de dólares
El valor de los terrenos se disparó en los últimos años, en sintonía con el alza de los precios en todo Tel Aviv, que aparece regularmente en las listas de las ciudades más caras del mundo.
Según Globes, tenía un valor de 300 millones de shekels (unos 87 millones de dólares estadounidenses al cambio actual) cuando fue adquirido por Levinstein y Shikun & Binui.
Ahora, se estima que alcanza unos 647 millones de shekels (187,5 millones de dólares), un aumento del 115 por ciento.
Por su parte, el portal del diario Yediot Ahronot reportó que las demoliciones comenzaron después de que no se registraran objeciones a la ordenanza de zonificación que cambiará el paisaje del lugar, que en los últimos años se había convertido en un espacio marginal con altos niveles de inseguridad.
Con los trabajos que arrancaron esta semana para demoler el edificio de tres pisos donde alguna vez funcionó la célebre fábrica de pistolas LHB comenzó el proceso para la construcción de 600 de los poco más de 1.300 apartamentos que se levantarán en el lugar.
El plan general, precisó Yediot Ahronot, divide el área en cuatro complejos de planificación, donde los edificios a lo largo de Begin se caracterizarán por edificios de gran altura.
En cambio, el lugar donde estaban los andenes para los autobuses se destinarán a edificios públicos.
La vieja estación de autobuses fue uno de los lugares más concurridos de Tel Aviv durante décadas y sigue presente en la memoria colectiva de los residentes.
En 1995, el grupo de rock israelí Teapacks le dedicó una canción que se convirtió en uno de los grandes éxitos de la banda.