El centro de procesamiento de datos más grande de Israel podrá estar bajo tierra, instalado con la tecnología más avanzada en el interior de una vieja mina de cobre abandonada y alimentada por paneles solares en la superficie.
Según informó el diario Globes, la Autoridad de Tierras de Israel publicó una licitación para el desarrollo de la mina de cobre abandonada de Timna, cerca de Eilat, en el extremo sur del país.
Dentro del plan se prevé la construcción de una granja solar y un centro de datos subterráneo, que sería el más grande de Israel, indicó el portal de noticias económicas.
Los centros de datos son una creciente necesidad, prácticamente urgente alrededor de todo el mundo, mientras crece el uso de computadoras y la informatización de la sociedad humana.
Son edificios o salas de gran tamaño, con espacio para alojar amplios sistemas informáticos donde se concentran los datos de grandes empresas o de organizaciones gubernamentales y militares.
En el caso de la mina desarrollada y explotada por la empresa Timna Copper Mining Company entre 1959 y 1976, la licitación es por 2.080 dunams (520 acres) de terrenos cubiertos principalmente por pozos y desechos creados durante el proceso de extracción del metal de transición.
Terrenos de costos millonarios
Globes indicó que el futuro centro de datos subterráneo duplicará el tamaño del más grande de Israel, que actualmente es el SDS en Modi’in, unos 35 kilómetros al sur de Tel Aviv, «que cubre 12.500 metros cuadrados y consume 27 megavatios de electricidad».
El diario destacó que el costo del terreno no se especificó en la licitación, pero que se estima entre 60 y 150 millones de shekels (entre unos 15,7 y 40 millones de dólares), «mucho más barato» que los terrenos en el centro del país.
«Sin embargo, se estima que la limpieza de los residuos mineros y la gestión de los grandes pozos creados en la zona requerirán un gasto adicional considerable» por parte del desarrollador que gane la licitación, añadió.
La Autoridad de Tierras «espera que la energía barata del parque solar» en la superficie «y la proximidad al cable de fibra óptica Blue-Raman del Mar Rojo atraigan más interés en la zona», dijo el periódico.
Además, «como se trata de una licitación de desarrollo, con la fase de planificación a discreción del desarrollador» y no de la Autoridad de Tierras, se espera que eso «también mantendrá los costos más bajos».
«Enormes» necesidades de electricidad
Teniendo en cuenta que los centros de datos necesitan enormes sistemas de refrigeración para las computadoras, algunos comentaristas mostraron preocupación por la posible contaminación sonora.
Pero Hanan Ginat, alcalde del Consejo Regional de Hevel Eilot y ex presidente de la Sociedad Geológica de Israel, le aseguró a Globes que el centro de procesamiento de datos no se construirá cerca de una zona residencial.
Un reporte difundido a principios de este año estimó que el mercado de los centros de datos en Israel crecerá en más de 290 millones de dólares hasta el año 2027, y que se prevé la apertura de al menos ocho espacios de ese tipo.
Preparado por la firma Research and Markets, el informe prevé que el negocio de estos centros llegará a una valuación de 628,8 millones de dólares en Israel para el 2027, impulsado por inversiones de gigantes como Google y AWS, el brazo de servicios de computación en la nube pública de Amazon.