La invasión de Ucrania por parte de las tropas de Moscú llevó a la Unión Europea (UE) a replantearse la importación de combustibles desde Rusia, lo que podría representar una oportunidad para la exportación de gas israelí al mercado del viejo continente
El martes de esta semana, la Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la UE, anunció el lanzamiento de un plan para «independizar» al continente «de los combustibles fósiles rusos mucho antes del 2030, comenzando con el gas», a la sombra de la invasión de Ucrania.
«Este plan -añadió la Comisión en un comunicado emitido en Bruselas- también contempla una serie de medidas para responder al aumento de los precios de la energía en Europa y para reponer las reservas de gas para el próximo invierno» boreal.
«No podemos confiar en un proveedor que nos amenaza explícitamente»
La presidenta del organismo, Ursula von der Leyen, enfatizó: «debemos independizarnos del petróleo, el carbón y el gas rusos», porque «simplemente no podemos confiar en un proveedor que nos amenaza explícitamente».
«Para las semanas que quedan de este invierno, Europa tiene suficientes cantidades de gas, pero necesitamos reponer nuestras reservas urgentemente para el próximo año», reconoció por su parte Kadri Simson, quien está al frente de los asuntos de Energía en la Comisión.
Se trata de un plan puesto en marcha «en tiempo récord», comentó el analista Assaf Uni en el diario económico israelí Globes. La primera etapa del programa, añadió, es «reducir las importaciones de gas ruso en dos tercios antes de fin de año».
Según explicó el analista, un tercio se compensará con entregas de gas natural licuado (GNL) desde Qatar, Egipto y Estados Unidos, mientras que el otro tercio se afrontará a través de medidas como un refuerzo en la disponibilidad de biogás, reducción de la demanda y «un aumento en la producción de electricidad a partir de fuentes de energía renovables».
¿Dónde entraría Israel en este esquema? «Dado que Egipto importa gas de los depósitos israelíes y produce GNL a partir de él, Israel podría encontrarse abasteciendo a Europa en breve», apuntó Uni.
El plan europeo fue puesto en marcha «en tiempo récord»
«El año pasado -añadió-, Egipto exportó una cantidad récord de GNL, alrededor de un tercio (dos millones de toneladas métricas) a Europa, diez veces la cantidad del año anterior, según datos egipcios».
Israel descubrió dos enormes yacimientos de gas natural en sus aguas territoriales en el Mediterráneo: Tamar en el 2009 y Leviatán al año siguiente. El primero comenzó a producir en el 2013 y el segundo en el 2019, mientras que las exportaciones a Egipto comenzaron en enero del 2020.
Putin's war demonstrates the urgency of accelerating our clean energy transition.
— European Commission (@EU_Commission) March 8, 2022
Today we outline REPowerEU - our plan to increase Europe's energy independence:
⚡ Reduced demand for Russian fossil fuels.
⚡ Emergency measures to tackle energy prices in Europe.#EUGreenDeal
Algunos días antes de la invasión rusa de Ucrania, que comenzó el 24 de febrero de este año, el presidente de Turquía, Tayyip Erdogan, había deslizado la idea de participar junto a Israel de la exportación de gas.
«Podemos usar gas natural israelí en nuestro país, y más allá de usarlo, también podemos participar en un esfuerzo conjunto para su paso a Europa», dijo Erdogan a la televisión turca en el marco del proceso de reconciliación con Israel.
El hallazgo de gas en el Mediterráneo llevó a Israel «a su posición actual como productor autosuficiente y exportador»
A fines de febrero, un artículo del Jerusalem Post señalaba precisamente que, «con Europa dándose cuenta de su total dependencia del gas de Rusia, y si se juega con las cartas correctas, la crisis en Ucrania puede ser una oportunidad para la exportación de gas de Israel» al continente.
«La relación de Israel con el gas natural ha evolucionado significativamente en los últimos quince años», apuntó el artículo de Zachy Hennessey.
Hasta el 2012, recordó «Israel importaba su gas de Egipto, pero los descubrimientos graduales de mayores reservas» en el Mediterráneo «han llevado al país a su posición actual como productor autosuficiente y exportador».
Para afrontar una eventual demanda europea, Israel cuenta con alrededor de 10,8 billones de pies cúbicos de gas natural en Tamar y 22 billones en Leviatán.