Israel Aerospace Industries (IAI), la mayor empresa de armas y aviación del país y una de las más importantes del mundo, anunció que alcanzó un nuevo récord en sus operaciones y que prácticamente no da abasto con las ventas.
Voceros de la compañía informaron esta semana que IAI marcó el nivel de ingresos netos y ganancias brutas de un lapso de tres trimestres más alto en su historia, con ventas por unos 3.873 millones de dólares en el periodo enero-setiembre del 2023.
Pero eso no es todo, la firma, que desarrolla -en solitario o en asociación con otras compañías- productos como los misiles Barak, Arrow y Jericho, los satélites espía Ofek y los drones Harpy, además de dedicarse a la reconversión de aviones de pasajeros en cargo, tiene una acumulación de pedidos multimillonaria.
En un comunicado, la empresa dijo que su backlog se ubica ya en más de 16.600 millones de dólares.
La continuación de una tendencia
«Concluimos el tercer trimestre del año con una sensación de estabilidad que nos permite afrontar los desafíos que los combates actuales crearán en el cuarto trimestre», dijo el presidente de la junta directiva del IAI, Amir Peretz, en referencia al conflicto en marcha contra Hamas en la Franja de Gaza.
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Peretz apuntó que los resultados de IAI en el tercer trimestre de este año «indican una continuación de la tendencia» que venía mostrando «un aumento tanto en los contratos como en las ganancias» de la compañía, fundada en en 1953 y de donde salieron los aviones Lavi y Kfir.
«Estoy orgulloso de nuestras mujeres y hombres que se presentaron rápidamente a trabajar la mañana del 7 de octubre», el día del ataque terrorista de Hamas que desencadenó la guerra, y que, «desde entonces, están cumpliendo con sus tareas las 24 horas».
En ese sentido, el CEO de IAI, Boaz Levy, destacó que la empresa está en estos momento «trabajando en estrecha cooperación con el sistema de defensa israelí» y sus fuerzas de defensa, «produciendo y suministrando sistemas tecnológicos avanzados que satisfacen las necesidades de combate en el aire, el mar, la tierra y el espacio».
Sobre el aumento de la rentabilidad de la empresa, Levy dijo que «se debe a las intensas e impresionantes actividades de nuestros trabajadores tanto en Israel como en el extranjero, junto con muchos éxitos empresariales y ejemplos de colaboración en todo el mundo».
Récord también en gastos de Investigación y Desarrollo
«En este momento -concluyó-, IAI está trabajando todavía más duro de lo habitual para fortalecer la seguridad, la economía y toda la sociedad civil de Israel» en medio de la guerra con Hamas.
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El reporte de IAI precisó que la empresa registró un aumento del 18 por ciento en los ingresos netos en los nueve meses terminados el 30 de septiembre de 2023, llegando a unos 239 millones de dólares, frente a los 202 millones del mismo periodo del 2022.
También crecieron los gastos internos en Investigación y Desarrollo, llegando hasta aproximadamente 174 millones de dólares, en comparación con los cerca de 138 millones de dólares del periodo correspondiente el año pasado.
Solamente en el tercer trimestre del 2023, esos gastos crecieron hasta llegar a unos 65 millones de dólares, un notable aumento en comparación con los 48 millones de dólares del tercer trimestre del 2022.
Los récords de IAI están en sintonía con el auge de toda la industria militar de Israel.
En junio de este año se informó que este sector de la economía de Israel rompió sus marcas anteriores y alcanzó en el 2022 ventas totales de armas por alrededor de 12.566 millones de dólares, una cuarta parte de los cuales fueron a países árabes.
Con cada vez más ventas a países europeos preocupados por la invasión rusa de Ucrania, las exportaciones dieron un gran salto respecto de los 11.300 millones de dólares del 2021, que ya habían representado un aumento del 50 por ciento sobre los tres años anteriores y el doble de las de la última década.