Una empresa creada en Israel, y que ahora tiene su base en Suecia, anunció que recibió el tramo final de subvenciones oficiales para su proyecto para generar energía verde con las olas que rompen contra el puerto de Yafo.
Con estas financiaciones, provenientes del Ministerio de Energía de Israel, «el proyecto está completo» y podría estar funcionando en los próximos meses, señalaron voceros de la empresa, Eco Wave Power.
Cuando reciba autorización para sumarse a la red eléctrica nacional, precisaron, el sistema se convertirá en la primera central de energía de «olas en tierra» oficialmente activada y conectada de Israel.
La central tiene una capacidad instalada de 100 KW y está compuesta por diez flotadores a lo largo de la escollera rompeolas preexistente del puerto de la histórica ciudad de Yafo, que forma parte del municipio de Tel Aviv.
Cada flotador se conecta a la unidad de conversión de energía patentada de Eco Wave Power, que se encuentra en tierra, lo que permite un fácil acceso para la operación y el mantenimiento, explicaron.
Apenas el sistema se conecte a la red eléctrica, «Israel finalmente comenzará a explorar el inmenso poder de las olas, una de las fuentes de energía renovable más confiables y consistentes del mundo», afirmó Inna Braverman, cofundadora y directora ejecutiva de Eco Wave Power.
Con apoyo de la Unión Europea
Desde la compañía informaron que están «esperando la última aprobación técnica de la Compañía Eléctrica de Israel» y anticipó «una ceremonia oficial de conexión en los próximos meses».
Además del gobierno de Israel, la compañía recibió también fondos del Regional Development Fund de la Unión Europea (UE) y de la organización británica Innovate.
También participa del programa Horizon 2020 y recibió uno de los premios Global Climate Action de las Naciones Unidas.
En este mes de julio, además, recibió una subvención GREENinMED, otorgada por la Unión Europea en el marco del Programa de la Cuenca del Mar Mediterráneo ENI CBC, un proyecto promovido y gestionado por organismos de España, Francia e Israel.
«Estamos agradecidos por el apoyo continuo de la UE, ya que continúan dando prioridad a la energía limpia y considerando la sostenibilidad en su financiación», dijo Braverman.
La tecnología desplegada en el puerto de Yafo, añadió, «no solo puede generar electricidad limpia para la población local, sino también transformar a toda la comunidad mediante la creación de nuevos espacios y puestos de trabajo».
También servirá, completó, para «educar a la comunidad local y a los visitantes extranjeros sobre el poder y la importancia de la energía sostenible y de sus fuentes».