Las autoridades de Eurovision señalaron que Israel se encuentra entre los treinta y siete países confirmados para la edición 2024 del popular certamen musical, que se llevará a cabo en la ciudad sueca de Malmö en mayo del próximo año.
Algunas dudas habían surgido después del sanguinario ataque terrorista del 7 de octubre contra el sur de Israel, durante el cual agentes del grupo islamista mataron a 1200 personas y secuestraron a otras 240.
De hecho, el reality musical de donde salen en los últimos años los representantes nacionales para el concurso europeo, HaKohav HaBá (La próxima estrella), iba a arrancar a través de la pantalla del canal Keshet 12 el 31 de octubre pero el estreno fue suspendido.
Finalmente, el programa fue regresando de a poco, primero con homenajes a los soldados que participan de la operación Espadas de Hierro lanzada tras el ataque del 7/10 y con la difusión de grabaciones de los concursantes, que se habían registrado en setiembre.
La emisora Kan, en la lista de participantes
Ahora, en su anuncio formal, los responsables del certamen, que es organizado por la Unión Europea de Radiodifusión, confirmaron que su socio israelí, la emisora pública Kan, sigue a bordo del proyecto para el 2024.
Las semifinales y final que se realizarán entre el 7 y el 11 de mayo próximos marcarán la tercera vez que Malmö alberga el Festival de la Canción de Eurovisión después de las ediciones de 1992 y 2013, señaló el comunicado difundido este martes por la organización regional.
Además de Israel, están confirmados Albania, Alemania, Armenia, Australia, Austria, Azerbaiyán, Bélgica, Croacia, Chipre, Dinamarca, la República Checa, Estonia, Finlandia, Francia, Georgia y Gran Bretaña.
También estarán Eslovenia, España, Grecia, Islandia, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Malta, Moldavia y los Países Bajos.
La lista se completa con Noruega, Polonia, Portugal, San Marino, Serbia, Suecia, Suiza y Ucrania.
Tras los pasos de Noa Kirel
Malmö se convirtió en la sede de la edición del 2024 gracias al triunfo de su representante, la cantante Loreen, en el certamen de este año en Liverpool, Inglaterra, donde la enviada de Israel, la estrella Noa Kirel, obtuvo un resonante tercer puesto con su tema Unicorn.
«Se habló mucho sobre la decisión de Keshet 12 de devolver a la pantalla su programa musical estrella durante la guerra más difícil que Israel conoce desde la guerra de Iom Kipur, pero lo que se hizo no se puede deshacer», señaló una columna en el portal Walla.
Firmada por Ben Biron Brauda, la nota reconoció que después de un primer aplazamiento del debut «debido a las protestas de los espectadores» angustiados por la guerra y otro «en la noche en que se supo que dos soldados» israelíes habían caído en Gaza, HaKohav HaBá «llegó para quedarse», al menos según el ritmo de los acontecimientos.
Brauda remarcó que, en todo caso, esta versión del reality en tiempos de guerra «parece un híbrido entre un concurso de canto y una velada del Día de los Caídos», donde se puede ver a los concursantes y algunos artistas conocidos cantando junto a soldados de las FDI.
Política y pacifismo
Justamente, la presencia de jóvenes en uniforme en este proceso de preparación de Israel para Eurovision 2024 levantó voces de protesta entre ciertos sectores de los fanáticos del concurso.
Uno de los sitios de internet que canalizan la pasión por el certamen, escxtra.com, sacó un comunicado afirmando que la presencia de soldados en La próxima estrella tiene «el claro objetivo de justificar o promover la acción militar» en Gaza.
Los responsables del website afirmaron que, «desde el 7 de octubre somos testigos de la crueldad en Israel y Palestina» y que «nosotros, como muchos otros medios dedicados a Eurovisión, creemos que no estamos en condiciones de comentar sobre el asunto».
Sin embargo, apuntaron que el hecho de que haya soldados cantando en HaKohav HaBá va en contra de los valores de pacifismo del concurso y su posición prescindente de la política internacional.
Otro de los muchos sitios que se ocupan del concurso, Eurovision Fun, citó a una activista noruega que fue todavía más allá y pidió un boicot de Malmö 2024 si efectivamente participa Israel.
¿Un doble rasero?
«Creo que existe un doble rasero al excluir a Rusia y al mismo tiempo permitir que Israel continúe participando en la competencia, a pesar de que están violando el derecho internacional», opinó Ida Helene Benonisen una activista por los derechos indígenas y LGBTQ.
Después de invadir Ucrania en febrero del 2022, Rusia fue expulsada del célebre concurso musical europeo, que los enviados de Moscú ganaron en solamente una ocasión desde que comenzaron a participar, en 1994. Fue en el 2008 con la canción Believe, de Dima Bilan.
Israel, en cambio, tiene cuatro campeones, comenzando por Izhar Cohen y Alphabeta en París 1978 con A-Ba-Ni-Bi, Milk and Honey con Hallelujah, en 1979 en Jerusalén, y Dana International, que en Birmingham 1998 se convirtió en la primera concursante y ganadora transgénero de la historia de Eurovision con Diva.
La lista se cierra, por ahora, con la talentosa Netta Barzilai, que conmovió a jueces y público de todo el mundo con Toy, una explosiva canción de empoderamiento femenino.