La estrella israelí Gal Gadot seguirá siendo la Mujer Maravilla, o al menos así se desprende de un breve comentario en las redes sociales del nuevo jefe de los DC Studios, la casa cinematográfica que produce la saga de Wonder Woman.
Una catarata de rumores había sacudido el mundo de los fanáticos de los superhéroes a principios de este mes de diciembre, cuando se supo que las autoridades de DC Studios habían rechazado el proyecto vigente para realizar el tercer capítulo de la nueva serie de películas de la Mujer Maravilla.
Admiradores (y algunos detractores) de la actriz israelí aseguraron que Gadot había sido prácticamente echada del «universo DC» al igual que su amiga Patty Jenkins, la directora de los primeros dos filmes.
Sin embargo, el cineasta James Gunn, director de enormes éxitos como «Guardianes de la Galaxia» (2014) y ahora uno de los presidentes de DC Studios, salió a rechazar públicamente esa versión, aunque en muy pocas palabras.
En efecto, un fan escribió en Twitter que, si bien apoyaba la llegada de Gunn al comando del estudio de cine, «la decisión de echar a Cavill», el hasta ahora protagonista de Superman «y Gadot (especialmente después de que anunciaron su regreso) no inspira confianza».
Si se cancela definitivamente la película, Gal se estaría perdiendo un cheque de 20 millones de dólares
A eso, Gunn respondió: «I’m not sure where you’re getting that we ‘booted’ Gal» («No estoy seguro de dónde sacaste que echamos a Gal»).
Los reportes de los primeros días de diciembre señalaban que, en cambio, Gadot se estaría quedando sin su suculento cheque de 20 millones de dólares por protagonizar la tercera película de la nueva saga de Wonder Woman.
Aquellos informes dieron a entender que Gadot y Jenkins estarían siendo desplazadas en medio de una fuerte reorganización de los estudios, precisamente con la llegada de los nuevos jefes, Gunn y Peter Safran.
Según los analistas de los negocios de Hollywood, Gunn y Safran llegaron a los DC Studios para moderar la influencia de los directores en la creación de las películas basadas en personajes de historietas y hacerlas más «livianas» y divertidas, al estilo de las que produce su archirrival Marvel.