La nueva comedia del actor judío estadounidense Adam Sandler está marcando récords de audiencia en la plataforma Netflix y es un éxito en todo el mundo. Incluyendo, por supuesto, los países árabes.
A diferencia de los boicots lanzados alguna vez por parte del mundo árabe cuando un filme estaba protagonizado por una estrella israelí, como fue el caso de Muerte en el Nilo con Gal Gadot, parecer ser que no hay problemas cuando el elenco está encabezado por un judío si es de Estados Unidos.
Así lo está demostrando Misterio a la vista 2, que Sandler protagoniza junto a Jennifer Aniston y que se encuentra, ya una semana después de su estreno, en el número uno de los televisores de Egipto, Jordania y Arabia Saudita, por ejemplo.
El filme -que es el número uno también en países desde Argentina a Estados Unidos, pasando por Brasil, Chile, Dinamarca, Kenya, Portugal y Perú- encabeza el ranking en Bahrein, Kuwait, los Emiratos Árabes Unidos y en el Líbano, donde fue un gran suceso la serie israelí Fauda.
El actor quiere visitar Israel… y aprender hebreo
Según los datos del sitio especializado FixPatrol, la nueva comedia de Adam Sandler está segunda entre las películas más vistas en Oman, Turquía, Pakistán, Marruecos, Qatar y hasta en Indonesia, que acaba de perder la organización del mundial de fútbol sub-20 por no querer admitir a la delegación de Israel.
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Murder Mystery 2, tal su título en inglés, fue el principal lanzamiento de Netflix en su sección de filmes después de su debut, el 31 de marzo. En sus primeros tres días, la película se convirtió en el segundo estreno de fin de semana más grande de la plataforma para una comedia, con más de 42 millones de visitas.
La secuela protagonizada por Sandler y Aniston, destacó la revista Variety, «obtuvo un total de 64,42 millones de horas vistas durante la ventana de visualización del 27 de marzo al 2 de abril y también apareció en el Top 10 en 91 países».
Sandler, por su parte, viene de recibir el mayor premio del humorismo en Estados Unidos, el Mark Twain Prize que concede el Centro John F. Kennedy para las Artes Escénicas, el prestigioso complejo cultural en la ciudad de Washington.
El actor, nacido en Nueva York en 1966, suele usar nombres judíos para sus personajes y declaró sus intenciones de aprender hebreo y visitar Israel. Su próxima película, en preparación, trata sobre el complicado bat mitzvá de una jovencita judía estadounidense.
