Rachel Zegler, la actriz de origen colombiano que se convirtió en la «rival» de la israelí Gal Gadot durante el desarrollo de la nueva Blancanieves de Disney -incluyendo, al parecer, una fuerte grieta política- encarnará a la mítica Evita Perón en teatro.
A mediados de marzo se informó que Zegler, que interpretó al personaje que da el nombre a la película Blancanieves, arrancará la temporada teatral con Evita en el West End londinense a partir del primer día de julio de este año.
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Poco después del anuncio, el sábado último, se pudo a Zegler y a Gadot -que le puso el cuerpo a la Reina Malvada- juntas en la reducida premiere de Snow White, en Hollywood.
El tema principal de la prensa de espectáculos no fue precisamente el filme sino la versión minimizada del evento de presentación, que tendría que ver con las duras críticas que recibió la película y la «tensión» entre las dos protagonistas principales.
Los fans de Blancanieves y de Disney ya habían puesto el grito en el cielo cuando la empresa de Mickey contrató a Zegler, una actriz de estilo latino, para el papel principal, que siempre fue presentado como una joven europea de piel blanca.
También hubo controversia por el hecho de no haber contratado a actores de talla baja para los roles de los «siete enanitos», en medio de una polémica por las opiniones woke de Zegler sobre la historia clásica de Blancanieves.
En el medio, Israel y los palestinos
La frutilla del postre fueron los comentarios pro-palestinos de la actriz de origen colombiano, que chocaron con la posición muy pro-israelí de Gadot, una orgullosa defensora de su país, en especial después del ataque del 7/10 y en medio de la guerra en Gaza.
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Toda esta «tensión en torno a la remake de Blancanieves de Disney podría extenderse a las estrellas Rachel Zegler y Gal Gadot», reconocieron fuentes del mundo del espectáculo citadas por la revista People.
Zegler, de 23 años, «no tiene nada en común con Gal Gadot, madre de cuatro hijos» y a punto de cumplir 40, añadieron los chismosos. «Además -apuntaron-, sus opiniones políticas difieren, lo que aumenta la tensión» alrededor de la Snow White del 2025.
Otra fuente que habló con People trató de minimizar el asunto. «A Gal le molesta el drama» que originó la película. La actriz israelí «disfrutó del rodaje, se llevaba bien con Rachel, pero no son amigas: no tienen nada en común, hicieron un trabajo juntas y punto».
Después de ese «trabajo», Gal tiene enfrente cuatro filmes: el thriller The Runner, Hand of Dante, dirigida por Julian Schnabel y donde comparte cartel con Gerard Butler, una película sobre la enfermera Irena Sendler, que combatió a los nazis, y su acariciado proyecto sobre Cleopatra.
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Zegler, por su parte, se concentrará en el musical que Andrew Lloyd Webber escribió sobre la ex primera dama argentina.
«Evita fue un musical muy importante para mí desde pequeña, cuando mi papá y yo cantábamos Don’t Cry for Me Argentina juntos en mi patio trasero», afirmó Zegler. «El escenario siempre me pareció mi hogar y estoy deseando debutar ya en el West End», completó.
