El estadounidense Quentin Tarantino parece haber encontrado su lugar en el mundo: el ultra famoso director de «Pulp Fiction» estaría listo para vivir «feliz para siempre» en Tel Aviv, adonde reside desde hace tres años y acaba de tener a su segundo retoño (una niña) junto a la israelí Daniella Pick
Esa es la descripción de la situación actual del creador de «Kill Bill» según el diario New York Post, que le dedicó un largo artículo al director, con abundantes fotos de su romance medioriental.
«Érase una vez en Tel Aviv: la nueva vida de Quentin Tarantino en Israel» se titula la nota, firmada por Karen Chernick en el tabloide neoyorquino.
Tarantino, reportó la historia publicada a mediados de julio, «lleva tres años viviendo una vida discreta en la soleada metrópolis mediterránea».
Y como ejemplo de esa «vida tranquila», el diario destacó que «la prensa israelí tardó todo un día en enterarse» de que Tarantino estaba «dando vueltas por la sala de obstetricia» del hospital Ijilov de Tel Aviv.
¿La razón? El director no estaba disfrazado ni se escapaba de las cámaras. Sencillamente, tal como se ha «convertido en su estilo de vida en Israel, los Tarantino se escondían a plena vista«.
Once upon a time in Tel Aviv: Quentin Tarantino's new life in Israel https://t.co/s3rqZwEx1d pic.twitter.com/VVIvrZN1kh
— New York Post (@nypost) July 16, 2022
«Escuché que estaba allí por nuestra partera, pero nunca vi a Tarantino», dijo Carnie, una actriz que dio a luz a su hija al mismo tiempo en el mismo hospital, citada por el diario.
Es decir, Quentin y Daniella son prácticamente dos vecinos más de Tel Aviv, adonde apenas si llaman la atención.
«Érase una vez en Tel Aviv: la nueva vida de Quentin Tarantino en Israel», tituló el New York Post
La ciudad israelí «puede parecer un aterrizaje inesperado para Tarantino, pero puede que solo sea su ‘feliz para siempre’ lugar en el mundo, evaluó Chernick.
En efecto, la noticia del nacimiento de la hija del matrimonio -que se sumó a su hermano mayor, Leo- se conoció muchas horas después del parto, y solamente porque un reportero de la farándula dio el alerta en sus redes sociales.
A Tarantino también se lo vio a principios de junio entre el público que llegó al estadio Bloomfield, de Tel Aviv, para el concierto del tenor italiano Andrea Bocelli.
Su presencia apenas si fue registrada en algunos posteos en Twitter.
Pulp Fiction Director Quentin Tarantino meets @netanyahu & Sara at concert of Andrea Bocelli last night in Tel Aviv and asks them where in the city he can get a Royale with Cheese https://t.co/TqYjV6Wah7 pic.twitter.com/JQm8d1Gaqi
— Gil Hoffman (@Gil_Hoffman) June 9, 2022
El Post recordó que Tarantino, de 59 años, y Daniella, de 38, se conocieron en el 2009 cuando el director visitó Israel para promocionar su filme «Inglorious Basterds».
Después de algunos altos y bajos en la relación, se casaron en una íntima ceremonia judía reformista en Beverly Hills nueve años después.
Daniella, explicó el Post a sus lectores, «es prácticamente realeza en Israel, donde ha sido tan famosa como Tarantino desde su nacimiento» porque es la hija de uno de los próceres de la música pop local, Tzvika Pick.
Tras casarse con la joven israelí, continuó el extenso reportaje del diario neoyorquino, Tarantino compró una residencia de seis habitaciones y 270 metros cuadrados en Ramat Aviv, «un vecindario tranquilo en el norte de Tel Aviv y a poca distancia del Mediterráneo».
La «villa» -según la describe el Post- se sumó así al apartamento que el director mantiene en Nueva York y la casa que adquirió en Los Angeles en 1989, y que fue el escenario de la boda con Daniella.
«A menudo se ve a Tarantino trotando, caminando o andando en bicicleta en el Parque Hayarkon»
Sin embargo, su casa israelí parece haberse convertido en la favorita. «Tarantino se instaló después de terminar la producción de ‘Once Upon a Time in Hollywood’, del de 2019, y planeaba dividir su tiempo entre Tel Aviv y Los Angeles», señaló el diario.
«Luego llegó la pandemia, y nunca se fue», apuntó el reportaje.
De hecho, el director soportó valientemente una experiencia típicamente israelí: los cohetes lanzados por el grupo radical islámico Hamas desde la Franja de Gaza y las inquietantes sirenas que llaman a los refugios.
«Mis amigos israelíes me dicen: ‘Después de los cohetes, ahora puedes llamarte oficialmente israelí'», contó Tarantino a la prensa local en medio de los proyectiles que caían en el país durante el conflicto de mayo del 2021.
«A menudo se ve a Tarantino trotando, caminando o andando en bicicleta en el Hayarkon, un extenso parque urbano» en Tel Aviv, describió el Post. Y, «si bien la mayoría de los habitantes» de la ciudad «tienden a dejarlo tranquilo, el director se convirtió en un imán «para los paparazzi locales», reconoció.
Por cierto, si bien el director se convirtió en un hijo pródigo de Tel Aviv, fue la Universidad Hebrea de Jerusalén la que recientemente lo celebró.
Desde mediados de junio, Tarantino es doctor honoris causa por la casa de altos estudios de la capital israelí.