La vida de Marilyn Monroe terminó en tragedia -murió por una sobredosis de barbitúricos en agosto de 1962 en Los Angeles- y todavía quedaba una nueva posible frustración alrededor de su legendaria figura: la demolición de su última casa, que había comprado pocos meses antes de su fallecimiento.
Las topadoras habían sido detenidas en octubre del 2023 y, a fines de junio del 2024, fueron canceladas para siempre gracias a una resolución del consejo municipal de la ciudad de Los Angeles, que declaró la mansión un «monumento cultural» de California.
Norma Jeane Mortenson, más conocida como Marilyn Monroe, había adquirido la propiedad, una gran casa de estilo colonial español, por 75.000 dólares en la primavera boreal de 1962, después de filmar Something’s Got to Give y, justamente, después de divorciarse del dramaturgo Arthur Miller.
La actriz, recordó el portal ArtNet al comentar la noticia, la había decorado «con muebles elaborados por artistas mexicanos«.
Unos vecinos con poco sentido de la historia
Según los reportes, los dueños de la casa de Monroe viven en la residencia de al lado y la compraron para demolerla y extender su propiedad.
No parecía importarles el valor histórico de la mansión de la protagonista de Some Like It Hot (1959).
En cambio, después de la suspensión temporal de la demolición a fines del 2023, el consejo municipal angelino votó por unanimidad, 12-0, agregar a la última casa de Marilyn en el 12305 West 5th Helena Drive a la lista de monumentos culturales históricos de la ciudad.
De esta manera, se aprovechó «la oportunidad de hacer algo que debería haberse hecho hace sesenta años», dijo la concejal Traci Park, una de las principales impulsoras del proyecto.
«No hay otra persona o lugar en la ciudad de Los Angeles tan icónico como Marilyn Monroe y su casa en Brentwood», añadió.
Park afirmó que «es probable que no haya ninguna mujer en la historia o la cultura que capture la imaginación del público como lo hizo Marilyn Monroe«.
«Incluso tantos años después, su historia todavía nos inspira», completó la funcionaria norteamericana.
