El personaje de Sabra, la superheroína israelí que interpretará la actriz Shira Haas -famosa por su trabajo en «Shtisel» y «Poco ortodoxa»- en el próximo filme del Capitán América, será reescrito para hacerlo políticamente correcto y perder sus alusiones al conflicto del Medio Oriente
Así lo deslizaron voceros de la compañía Disney y su subsidiaria Marvel Studios.
En comunicados a la prensa, los portavoces del grupo encargado de producir las películas basadas en los personajes del «universo Marvel» dijeron que están tomando un «nuevo enfoque» con Sabra para la pantalla grande.
«Si bien nuestros personajes e historias están inspirados en los comics» lanzados hace ya varias décadas, «siempre se imaginan de manera fresca para la pantalla y el público actual», dijeron voceros de Marvel al responder una consulta de la revista de espectáculos Variety.
Los encargados de desarrollar la película, agregó la nota, «están adoptando un nuevo enfoque con el personaje de Sabra, que se presentó por primera vez en las historietas hace más de 40 años«.
Como de costumbre cuando un actor, actriz, personaje o evento israelí llega a un gran producción de Hollywood, la decisión fue duramente criticada en las redes sociales por usuarios y organizaciones pro-palestinas.
Episodios similares ocurren desde que la israelí Gal Gadot fue contratada para personificar a la Mujer Maravilla. Por ejemplo cuando la actriz anunció la producción de una película sobre Cleopatra, a quien tiene pensando encarnar en una nueva versión «feminista».
Creada en los años ’80 por Bill Mantlo y Sal Buscema, la superheroína israelí es un personaje menor del «universo Marvel» que apareció en unas pocas historietas del Increíble Hulk.
En la historia, Sabra es una joven «humana mutante» con superpoderes que es entrenada por el Mossad en un kibbutz antes de ser lanzada al mundo como agente del espionaje israelí.
Las apariciones de Sabra son, en efecto, producto de una época en que grupos terroristas palestinos secuestraban aviones de pasajeros o cometían matanzas como la de los Juegos Olímpicos de Munich 72.
Pero, al mismo tiempo, Sabra era presentada como una agente sin corazón y despiadada, que «aprendió» a ver los árabes como «seres humanos» gracias a Hulk.
Variety citó un artículo de la CNN según el cual, en los comics originales, «Sabra a menudo luchó contra estereotipos árabes ofensivos», algo que, apuntó la revista, «aumentó las preocupaciones de los palestinos sobre el personaje» del próximo filme «Captain America: New World Order».
El Institute for Middle East Understanding, «una organización pro-palestina con sede en Estados Unidos, criticó el carácter de Sabra por ‘glorificar al ejército y la policía israelíes’, agregó el reporte de Variety.
«Vale la pena señalar», concluyó la revista, que a medida que Marvel aumentó la «representación» de minorías en sus películas, «habitualmente contrató asesores culturales para garantizar que el estudio no refuerce estereotipos dañinos».