La emisora de televisión por cable HBO preparó un documental sobre una de sus más polémicas y admiradas estrellas, el comediante Larry David, a quien presenta como «The American Jewboy» («El muchacho judío americano», o estadounidense)
En dos capítulos, la serie repasará la historia de David, el creador detrás de «Seinfeld» y «Curb Your Enthusiasm», desde sus «humildes comienzos como un niño sin gracia de Brooklyn», como lo describe el reporte del New York Post, hasta convertirse en «el misántropo favorito de Estados Unidos», según el adelanto de HBO.
«The Larry David Story» comenzará a ser difundido por el popular canal de cable el 1 de marzo, y consta de dos capítulos: «The American Jewboy» y «The Jewish Fountainhead», un título de difícil traducción que se refiere a una novela de 1943 de Ayn Rand.
(El libro, «The Fountainhead», que relata la historia de un joven arquitecto, desliza que el ego humano sería la fuente principal del progreso. El título de la novela quedó impregnado en el habla popular estadounidense como un sinónimo de elogio al individualismo y la creatividad, algo que aplica muy bien a la carrera de David).
«Cuando tenía 25 años, no sabía lo que quería hacer», confesó el comediante
Las escenas que difundió el trailer de HBO muestran al comediante en su salsa, haciendo humor autocrítico, sarcástico y auto-ridiculizante, marcas típicas de la comedia judía, en especial en Estados Unidos.
Entrevistado por su amigo y habitual colaborador Larry Charles, David no tuvo problemas en definirse como «un fraude».
Sobre la serie que lo mantiene entre lo más visto de la televisión, «Curb Your Enthusiasm», el comediante aseguró que el programa gira alrededor «de la persona que quiero ser».
El protagonista de «Curb» es «completamente honesto, todo lo contrario de lo que soy yo», apunta en el trailer, mitad en serio y mitad en broma.
También habla sobre sus comienzos como el niño «sin gracia» nacido en 1947 en una típica familia judía de la ciudad de Nueva York y su arranque en el mundo del espectáculo.
Cuando tenía «veinticinco años, no sabía lo que quería hacer», confesó en su conversación con Charles.
«¿Qué haces cuando estás hablando y la gente se ríe? Haces comedia», describió el talento natural que lo llevó a iniciar su camino en el stand up.
Su humor arriesgado muchas veces explora los límites del «buen gusto»
«Nunca pensé en mí mismo como una persona graciosa», continuó el escritor y actor. «Cualquier cosa con la que estuve asociado que pudiera tener éxito fue un shock», aseguró el hombre que fue nominado cuarenta y siete veces a los principales premios Emmy.
En otro momento, David comparte algunas pinceladas de la relación con su madre, Rose, una verdadera «idishe mame».
Durante los años de «Seinfeld», cuando David llegó a la cúspide del éxito y la fama, «mi madre me llamaba y decía: ‘Larry, ¿les agradas? ¿Te dicen que estás haciendo un gran trabajo?'».
«Sí, mamá, les gusto. El programa es el número 1 en el país», le respondía el actor.
Y su madre retrucaba: «si, está bien… ¿pero te dijeron que lo estás haciendo bien?«.
Más allá de su indiscutible talento, David muchas veces levanta polémicas por su humor arriesgado, que a menudo explora los límites del «buen gusto», incluso cuando recorre temáticas judías o referidas a Israel.
Es muy recordado, por ejemplo, un capítulo de «Curb Your Enthusiasm» en el que conquista a la bella mujer palestina propietaria de un local de comida árabe en Los Angeles.
Tras un confuso episodio, en el que el personaje de Larry discute con un amigo que está manifestando fuera del negocio de platillos de pollo y le hace caer la kipá, la mujer lo confunde con un judío pro-palestino. Y el protagonista de la serie no hace nada para aclararlo.
El actor «nunca ha sido tímido a la hora de satirizar el judaísmo»
La escena romántica entre la mujer palestina y Larry es extraordinaria, y puede tanto arrancar carcajadas como insultos de enojo incluso entre simpatizantes del estado de Israel.
También es recordado un chiste sobre los campos de concentración que hizo durante un monólogo el programa «Saturday Night Live», muy original, pero también al borde del abismo humorístico.
En la comedia de HBO, que se encuentra en su temporada 11, David «nunca ha sido tímido a la hora de sacar a la superficie y satirizar el judaísmo y la identidad judía», apuntó el comentarista Andrew Sillow-Carroll.
El actor «ha contemplado los dilemas de la supervivencia del Holocausto, se metió en el conflicto israelí-palestino (a través de un restaurante de pollo) y quedó varado en un telesilla con un judío ortodoxo en Shabat», recordó el crítico en un artículo de la Jewish Telegraphic Agency.
Aunque Larry se declara ateo, es imposible dejar de ver -y disfrutar- los incontables rastros de una vida judía en las desopilantes comedias de este niño «sin gracia» de Brooklyn que se convirtió en una de las máximas referencias del humorismo norteamericano.