El ministerio de Exteriores de Israel anunció este sábado que su embajada en Ucrania seguirá abierta en Kiev mientras continúen las evacuaciones de israelíes y ciudadanos judíos que quieran salir del país
Según el reporte, el embajador Michael Brodsky permanecerá en la capital ucraniana y, por el momento, queda postergado el traslado de la representación diplomática a la ciudad de Lviv.
Ubicada en la región oeste del país, cerca de la frontera con Polonia, Lviv se considera una zona más segura frente a un eventual ataque militar ruso. Varias embajadas se mudaron ya a esta ciudad, así como la representación de la alianza militar OTAN, entre otras organizaciones.
El Jerusalem Post indicó que Brodsky permanecerá en Kiev junto con su personal «en el futuro inmediato». Citando a la cancillería, el diario precisó que los diplomáticos seguirán en la capital «para ayudar a los israelíes a regresar», a pesar de los preparativos para trasladar la sede.
Las fuerzas armadas de Ucrania y los separatistas prorrusos volvieron a acusarse de nuevos ataques y de violar el alto el fuego en el este del país. El ejército de Kiev reportó 66 incidentes armados hasta las 4h GMT del sábado y los rebeldes hablaron de situación "crítica" #AFP pic.twitter.com/syFWg3TKUO
— Agence France-Presse (@AFPespanol) February 19, 2022
A través de un mensaje en sus redes sociales, el ministerio reiteró su «llamado a los ciudadanos israelíes en Ucrania para que abandonen el país de inmediato».
Por otro lado, en un comunicado, la cancillería alertó sobre los recientes «eventos en Ucrania oriental» y advirtió que la «erupción» de un conflicto bélico será «será rápida y severa».
Citados por la cadena estadounidense de noticias CNN, oficiales de las fuerzas armadas ucranianas dijeron este sábado estar «listos para cualquier escenario» frente a las tropas rusas, mientras seguían explotando proyectiles de mortero en zonas con fuerte presencia de rebeldes pro-Moscú.