Una amplía mayoría de los votantes judíos de Estados Unidos seguirá la tradición de décadas y apoyará al candidato demócrata, en este caso la vicepresidenta Kamala Harris, y dará la espalda a su rival republicano, Donald Trump, en las elecciones de noviembre.
Los datos pueden despertar algunas dudas ya que fue encargada por la Jewish Democratic Coalition of America (JDCA), una organización judía de Estados Unidos que apoya al Partido Demócrata.
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Sin embargo, sus números están en sintonía con el comportamiento del voto judío desde 1968, que fue 71 por ciento azul y 26 por ciento rojo, según un estudio publicado por la Jewish Virtual Library.
En efecto, la encuesta divulgada esta semana por la JDCA -que ya había endorsado en julio último a Harris- mostró a un 72 por ciento de los votantes judíos a favor de la vicepresidenta y un 25 por ciento dispuesto a entregar su sufragio a Trump.
«Trump no logró ningún avance entre los votantes judíos en las últimas tres elecciones», afirma el reporte de la JDCA. «Aun así, no podemos dar por sentado este apoyo» porque «las encuestas no votan», reconoció la organización.
Según el estudio de la Jewish Virtual Library, Trump sí marcó un avance en el apoyo de los judíos estadounidenses entre las elecciones del 2016 que lo llevaron a la Casa Blanca (24 por ciento) y las del 2020 que lo desalojaron en favor del actual presidente, Joe Biden (30 por ciento).
Ahora, en noviembre del 2024, «los judíos estadounidenses que apoyan a Kamala Harris sólo pueden marcar una diferencia en los estados en disputa si votan», reconocieron desde la JDCA. El voto judío, por ejemplo, tiene históricamente un fuerte peso en el estado de Florida.
Israel, en el debate político en Estados Unidos
Aunque el país enfrenta problemas más acuciantes, la cuestión del Medio Oriente en general, y la guerra en Gaza contra Hamas, en particular, están ocupando grandes espacios en los medios y en el debate político.
Harris, por ejemplo, ya dio a entender que si llega a la Casa Blanca no impondrá ningún embargo a las ventas de armas estadounidenses a Israel ni recortará su volumen, intentando despejar temores de algunos analistas.
Trump, por su lado, apostó al miedo: en un mitin a principios de setiembre en Wisconsin, el ex presidente opinó que, si gana Harris, en «uno o dos años, Israel ya no existirá».
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«Será mejor que yo gane, o tendremos problemas como nunca los hemos tenido», dijo Trump, quien se declaró listo para «poner fin al caos en Medio Oriente y evitar la Tercera Guerra Mundial».
El promedio de las encuestas nacionales del sitio especializado Real Clear Politics ubicaba este martes a Harris levemente delante de Trump, con 48,4 por ciento de las preferencias en los sondeos contra el 47,3 de Trump.