La Federación de Comunidades Judías de España (FCJE) se declaró «muy preocupada» por las recientes declaraciones de algunos ministros del gobierno de Madrid y por la decisión del Centro de Arte Reina Sofía de montar una exhibición pro-palestina de título provocador.
Insólitamente, el popular museo de la capital española abrió esta semana la muestra «Desde el río hasta el mar – Solidaridad internacional con Palestina».
Según los responsables del centro cultural, «Desde el río hasta mar», la zona entre el río Jordán y el mar Mediterráneo, es un «poético lema utilizado desde los años 60 como reivindicación de la libertad y la igualdad de derechos de los palestinos».
Los responsables de la muestra se olvidaron de mencionar que el lema es ampliamente conocido como un grito de guerra terrorista para, precisamente, eliminar el estado judío que se encuentra entre el río y el mar.
Pero en el website del Reina Sofía aseguran que se trata de un «llamado al respeto a la vida» y «en ningún caso» de un «aliento a la guerra o a la violencia, ni referido de ningún modo a la desaparición del estado de Israel».
«Este programa quiere resonar con las voces que claman por la paz en todo el planeta», explican los encargados de la muestra en el museo de Madrid, desde donde también se conoció el comunicado de la FCJE.
La nota de la organización apuntó contra la exhibición y también sobre declaraciones de varios funcionarios del gobierno del primer ministro Sánchez, como -por ejemplo- Pablo Bustenduy, al frente de la cartera de Derechos Sociales y Consumo.
Bustenduy pidió a las empresas españolas con negocios en Israel que suspendan esos negocios porque, según interpretó, están participando de manera «directa o indirecta» en la guerra de la Franja de Gaza.
Incitaciones y seguridad reforzada
«Todos estos actos pueden suponer incitación al odio y alientan el antisemitismo que se ha disparado en España y que los judíos españoles llevamos sufriendo desde el día 7 de octubre» cuando Hamas «perpetró una masacre cruel y sádica en el sur de Israel», dijo la FCJE.
Desde esa invasión, que dejó 1200 muertos en las comunidades de la zona fronteriza con Gaza y decenas de secuestrados, «los judíos españoles hemos recibido ataques en nuestras casas, propiedades, centros comunitarios, insultos, amenazas y amedrentamiento».
La FCJE remarcó que los colegios hebreos del país funcionan con seguridad reforzada y que «los fieles judíos acuden a las sinagogas bajo custodia policial». Eso, «en un país democrático, es cuando menos, una anomalía«, completó el mensaje de la organización.