El gobierno de Israel condenó públicamente este domingo lo que caracterizó como «crimen de guerra» de las tropas rusas en la localidad ucraniana de Bucha, adonde aparecieron fosas comunes y decenas de cadáveres en calles y edificios
«Es imposible permanecer indiferente ante las espantosas imágenes de la ciudad de Bucha, cerca de Kiev, tras la marcha del ejército ruso», afirmó el ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Yair Lapid.
En un mensaje difundido a través de las redes sociales, el ministro dijo que «dañar intencionalmente a una población civil es un crimen de guerra«.
«Lo condeno enérgicamente», completó Lapid.
Hasta la noche del domingo en Ucrania, autoridades locales hablaban de más 430 cuerpos hallados en Bucha tras la retirada de las tropas rusas, muchos con claras señales de violencia o torturas, incluyendo manos atadas y disparos a corta distancia.
Retirada rusa revela situación catastrófica en Bucha
— DW Español (@dw_espanol) April 3, 2022
La ciudad cercana a Kiev pagó un alto precio por su resistencia. @mikelayestaran visitó la localidad y se topó con "destrucción y muerte". Las imágenes son perturbadoras.#DWNoticias /cvml pic.twitter.com/vyZ1ES7xR8
Los reportes y las horrendas imágenes llevaron incluso a las Naciones Unidas a pedir al gobierno ucraniano que preserve los cuerpos y otros elementos que puedan aclarar la situación.
«Lo que se sabe» hasta ahora en Bucha «plantea preguntas serias e inquietantes sobre posibles crímenes de guerra» rusos en Ucrania, señalaron voceros de la organización internacional.
«Estamos muy preocupados -agregaron- por las fotos y videos disponibles, incluidas imágenes de cuerpos con las manos atadas a la espalda».