Esta es la historia de la primera víctima de los atentados del 11 de setiembre del 2001 contra el Pentágono y las torres gemelas de Nueva York, un hecho que torció la historia y se conoce simplemente como el 9/11.
Había nacido en Estados Unidos y a los 14 años se mudó a Israel, adonde cumplió con su servicio militar, estudió y se convirtió en un genio de las matemáticas. A los 30 años ya había revolucionado internet y era millonario.
Y, el 11 de setiembre del 2001, Daniel Lewin estaba a bordo de uno de los aviones que se estrelló contra las torres de Nueva York.
En el 2021, en ocasión del vigésimo aniversario de los atentados, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) recordaron a Lewin, quien -en su juventud- formó parte de una de las divisiones de comandos más prestigiosas del país, los Sayeret Matkal.
Para celebrar su vida, las FDI entrevistaron para su website a algunos de sus compañeros en aquella unidad de élite, quienes repasaron algunos momentos de su amistad y servicio.
Pero, antes, un repaso de la asombrosa vida de Lewin, quien había nacido en Denver, en el estado norteamericano de Colorado en 1970 y, catorce años después, hizo aliá junto a su familia.
Un verdadero genio de las matemáticas, Lewin sirvió en la famosa unidad de élite Sayeret Matkal de las FDI
En Israel, Daniel reveló rápidamente sus capacidades en las matemáticas, que lo llevarían más adelante a estudiar y trabajar en el Technion, la famosa universidad tecnológica en Haifa.
Además, Lewin desarrollaba otro costado de su personalidad, en el gimnasio, levantando pesas.
Daniel, contó uno de los soldados de su unidad, Gadi Haviv, «era simplemente un genio: no solamente era un tipo fuerte, era brillante».
Después de completar el servicio militar, Lewin pasó un fructífero tiempo en el Technion, adonde trabajó también como investigador. Y formó una familia, junto a su esposa Anne y sus dos hijos, Itamar y Eitan.
«Danny era un tipo con muchas facetas, era un padre que cambiaba pañales con su esposa y un estudiante estelar en el Technion, con especialización en matemáticas, ciencias de la computación e ingeniería eléctrica», rememoró por su lado Marco Greenberg, su mejor amigo en los tiempos de las FDI.
Tenía apenas un joven veinteañero cuando consiguió una beca para el MIT y revolucionó el mundo de internet
Para 1996, Lewin obtuvo una beca para estudiar en el Massachusetts Institute of Technology (MIT), posiblemente la más prestigiosa y famosa universidad de tecnología del mundo.
Una vez que se instaló en la casa de altos estudios norteamericana, pasó poco tiempo hasta que Daniel se destacó, creando un algoritmo que cambió para siempre internet, el «consistent hashing», una función que permite a los sitios web manejar altos tráficos de usuarios.
En 1998, junto con su profesor Tom Leighton y otros socios, Lewin cofundó Akamai Technologies -que sigue siendo una gran empresa de tecnología-, y se hizo millonario antes de los treinta años de edad.
Pocos años después, el 11 de setiembre del 2001, Daniel se dirigía a un viaje de negocios a Los Angeles, relata el artículo de las FDI. «Estaba sentado en clase ejecutiva, vestido modestamente con unos jeans Gap y una simple camiseta» en el American Airlines 11, continúa.
Daniel se hallaba a bordo del vuelo American Airlines 11 que se estrelló contra la torre norte
Es muy difícil saber qué pasó realmente a bordo de ese Boeing 767-223ER que cubría la ruta desde Boston hacia la ciudad californiana.
Según lo que pudieron reconstruir las fuerzas de seguridad estadounidenses en base a lo que llegaron a reportar el piloto y las asistentes de vuelo antes del choque contra la torre norte, una de las teorías es que uno de los atacantes acuchilló a Lewin para infundir miedo entre el resto de los pasajeros.
Otra versión, que suena más creíble en base a la personalidad de Daniel y su pasado en las FDI, es que intentó enfrentar a los secuestradores pero uno de ellos, que viajaba justo en el asiento de atrás, logró apuñalarlo.
De cualquier manera, Danny se convirtió en la primera víctima de los atentados del 9/11 de setiembre contra las torres gemelas y el Pentágono, dejando atrás una vida brillante y un legado.