Más de 200.000 personas (algunas fuentes señalaron 300.000) participaron este martes de la marcha sobre el National Mall de la ciudad de Washington, el espacio verde que conecta el Capitolio con el Obelisco, para reclamar la liberación de los rehenes capturados por Hamas y en contra del antisemitismo.
La Marcha por Israel fue organizada por la Jewish Federations of North America (JFNA) y la Conference of Presidents of Major American Jewish Organizations y atrajo, además de los manifestantes, a numerosos políticos norteamericanos, varios de los cuales hablaron ante la multitud.
El evento tuvo por objetivo convertirse en «una oportunidad para que todos los estadounidenses se unan en solidaridad con el pueblo de Israel» y «demostrar nuestro compromiso con el aliado más importante» de Washington en Medio Oriente, apuntó la convocatoria.
«Hoy expresamos nuestro apoyo a Israel», se reclamó la liberación de «los rehenes y combatir el antisemitismo», dijeron desde la JFNA.
«Estamos aquí para expresar pacíficamente apoyo y solidaridad» con Israel, afirmaron voceros de la marcha, quienes estimaron que el llamado atrajo a unas 290.000 personas.
«No nos caemos fácilmente y estamos luchando»
«Espero que el gobierno» de Estados Unidos «y todos nuestros representantes» en el Congreso «nos presten atención”, dijo Sydney Kaufman, uno de los manifestantes, de 33 años y llegado desde Nueva York.
290,000 people attended the #marchforIsrael in person. 250,000 watched online. We are thrilled, delighted, honored and proud to have organized the largest Jewish gathering in US history along with @Conf_of_Pres pic.twitter.com/PuicKsuH6A
— The Jewish Federations of North America (@jfederations) November 14, 2023
«No somos un grupo silencioso, no nos caemos fácilmente y estamos luchando por algo que es realmente importante», aseveró el joven judío norteamericano, citado por el diario USA Today.
El periódico recordó que «los incidentes antisemitas aumentaron drásticamente después del comienzo de la guerra» entre Israel y Hamas, que estalló después del ataque terrorista del 7 de octubre, que dejó 1200 muertos.
Tomando «datos preliminares» difundidos por la Anti-Defamation League, el diario apuntó que los incidentes de acoso, vandalismo y agresión contra los judíos en Estados Unidos aumentaron un 400 por ciento entre el 7 y el 23 de octubre.
De 312 incidentes reportados, 190 estaban «directamente relacionados» con la guerra entre Hamas e Israel, dijo el reporte de la organización que lucha contra el racismo y el antisemitismo.
«Nuestros corazones laten como uno solo», dijo Herzog
En ese sentido, la marcha de este martes ofreció un respiro a la enorme comunidad judía en Estados Unidos, la más grande del mundo después de Israel, con más de 5,7 millones de personas, según los cálculos más conservadores.
Not everyone calling for a ceasefire wants Israel to cease to exist. But everyone who wants Israel to cease to exist is calling for a ceasefire.
— Ritchie Torres (@RitchieTorres) November 14, 2023
Hamas, Hezbollah, and the Islamic Republic of Iran are all calling for a ceasefire. pic.twitter.com/F1JSPn4TiO
Entre los dirigentes políticos que hablaron ante la multitud en el National Mall, se destacó el ascendente congresista demócrata Ritchie Torres, de Nueva York, disparó duramente contra Hamas.
«Quiero ser muy claro: un alto el fuego con una organización terrorista no es un acuerdo de paz, es una sentencia de muerte para los israelíes», aseveró Torres.
Los manifestantes también pudieron escuchar al presidente de Israel, Itzjak Herzog, quien habló a través de una conexión de video desde Jerusalén. «Desde el 7 de octubre, la sociedad israelí y el pueblo judío realmente se han unido», dijo el presidente.
«Sentimos que nuestros corazones laten como uno solo, escuchamos la sangre de nuestros hermanos y hermanas llamándonos» desde Gaza, donde se estima que Hamas mantiene cautivas a más de 200 personas, concluyó Herzog.
Para William Daroff, CEO de la Conference of Presidents of Major American Jewish Organizations, el evento de hoy se transformó en «la mayor reunión proisraelí de la historia».
El dirigente estimó que, además de los 290.000 en la capital norteamericana, alrededor de 250.000 personas vieron la marcha online y a través de la cadena televisiva pública C-SPAN.