Al cumplirse tres meses del ataque de Hamas que dejó 1200 muertos en el sur del país y decenas de secuestrados, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, advirtió este domingo que «ningún terrorista es inmune» a la campaña para erradicar el extremismo islámico en la zona.
«Tengo un mensaje claro para nuestros enemigos: lo que sucedió el 7 de octubre no volverá a suceder», aseguró el jefe del gobierno israelí antes de una reunión de gabinete en Tel Aviv.
Netanyahu afirmó que ese «es el compromiso de mi gobierno y la razón por la cual nuestros soldados en el campo de batalla están dando sus vidas».
«Nuestros comandantes y soldados, reclutas y reservistas, en el norte y el sur, repiten una cosa -apuntó el primer ministro-: ‘no regresaremos hasta que llevamos a cabo la misión’, y yo digo: ‘no nos detendremos hasta la victoria‘».
Tras la cruenta invasión del 7/10, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) lanzaron la operación Espadas de Hierro para destruir a Hamas y rescatar a los rehenes cautivos en escondites del grupo islamista en la Franja de Gaza.
לא עוצרים עד שמנצחים! pic.twitter.com/j4LBnOIQAk
— Benjamin Netanyahu – בנימין נתניהו (@netanyahu) January 7, 2024
Además, las tropas israelíes están listas y alertas en la frontera norte, donde Hezbollah, otra organización fundamentalista patrocinada por Irán, está atacando con cohetes y drones desde el 7 de octubre.
Un mensaje para enemigos y amigos
En ese sentido, el primer ministro subrayó que «la guerra no debe detenerse hasta que logremos todos sus objetivos: eliminar a Hamas, devolver a casa a todos nuestros rehenes y garantizar que Gaza nunca más constituya una amenaza para Israel».
«Les digo esto tanto a nuestros enemigos como a nuestros amigos: esta es nuestra responsabilidad», enfatizó, para luego lanzar una advertencia directa a los islamistas en el sur del Líbano.
«Sugiero que Hezbollah aprenda lo que Hamas ya aprendió en los últimos meses: ningún terrorista es inmune» y que, en Israel, «estamos decididos a defender a nuestros ciudadanos y devolver a los residentes del norte sanos y salvos a sus hogares».
Según Netanyahu, ese es «un objetivo nacional que todos compartimos y por el que todos estamos trabajando para lograr de manera responsable». Y completó: «si podemos, lo haremos diplomáticamente, y si no, trabajaremos de otras maneras».