El gobierno de Bolivia anunció este martes su decisión de romper relaciones con Israel a causa de la guerra contra el grupo terrorista Hamas en Gaza, mientras que Chile y Colombia convocaron a sus embajadores en Tel Aviv para «consultas».
Bolivia tomó «la determinación de romper relaciones diplomáticas con el estado de Israel en repudio y condena a la agresiva y desproporcionada ofensiva militar» en Gaza, dijo el vicecanciller del país sudamericano, Freddy Mamani Machaca.
De esta manera, el gobierno del izquierdista Luis Arce se convirtió en el primero de América Latina en elegir suspender lazos con Israel en lugar de Hamas, el grupo islamista palestino que el 7 de octubre mató a más de 1400 personas en el sur del país y mantiene a más de 230 rehenes secuestrados.
«Tomando en cuenta estos antecedentes, vamos a comunicar de manera oficial a los canales diplomáticos establecidos entre ambos países», indicó Mamani, citado por la prensa boliviana.
Por su parte, la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, informó que el lunes de esta semana Arce «sostuvo una reunión con el embajador de Palestina en Bolivia, Mahmoud Elalwani, a quien le expresó su solidaridad».
Para Evo Morales, «no es suficiente»
Más allá fue el ex presidente boliviano Evo Morales, mandatario del país andino entre el 2006 y el 2019, según el cual romper relaciones diplomáticas con Israel «no es suficiente».
NOTA | Bolivia rompe relaciones diplomáticas con Israel y llama a cesar los ataques a la Franja de Gazahttps://t.co/32vBEPCXL8 pic.twitter.com/3NNhpYjifM
— Cancillería de Bolivia (@MRE_Bolivia) October 31, 2023
A través de un mensaje en su cuenta de la red social X, conocida antes como Twitter, el líder izquierdista opinó que «Bolivia debe declarar» a Israel como «un estado terrorista y presentar una denuncia ante la Corte Penal Internacional».
En el 2009, cuando era presidente, Morales tuvo la oportunidad de romper relaciones con Israel, también como protesta contra una campaña militar sobre Gaza. En aquel momento Bolivia expulsó al embajador israelí, pero las relaciones fueron restablecidas en el gobierno de Jeanine Áñez (2019-2020).
Boric y Petro, un paso más atrás
Un paso más atrás quedaron, al menos por ahora, otros dos presidentes izquierdistas de América Latina, el chileno Gabriel Boric y el colombiano Gustavo Petro, quienes habitualmente expresan comentarios pro-palestinos y anti-israelíes.
También este martes, y también apelando a la red social X, Boric anunció que convocó a consultas a su embajador en Israel ante lo que consideró «inaceptables violaciones del Derecho Internacional Humanitario» durante la campaña en Gaza.
«Chile -escribió Boric- condena enérgicamente y observa con gran preocupación» las acciones de la operación Espadas de Hierro, que ya logró eliminar a varios líderes terroristas de Hamas.
Finalmente, Petro se sumó a la tendencia de los gobiernos de izquierda de la región y dijo que llamó a consultas a su embajador en Tel Aviv. «Si Israel no detiene» lo que describió como una «masacre del pueblo palestino, no podemos estar allá», aseveró.

Petro ya había tenido un choque con el gobierno israelí poco después del ataque terrorista del 7 de octubre. A pesar de la evidencia de las atrocidades cometidas por los miembros de Hamas en el sur de Israel, el presidente colombiano eligió no condenar al grupo islamista.
En cambio, se lanzó en Twitter a una larga serie de mensaje con opiniones geopolítica y hasta citó su propio mensaje ante la asamblea general de las Naciones Unidas de pocos días antes, cuando presentó varias propuestas globales de paz.
El recuerdo del Che Guevara
Frente a la falta de condena a Hamas, el gobierno de Jerusalén respondió suspendiendo las ayudas militares a Colombia, donde las fuerzas armadas y la policía utilizan numerosos equipos y armas llegados desde Israel.
A mediados de octubre, Petro contestó la decisión israelí amenazando suspender las relaciones diplomáticas, aunque todavía no cumplió con esa advertencia.
Mirando hacia el pasado, existen numerosas ocasiones de involucramiento de la izquierda latinoamericana en el conflicto árabe-israelí, en general en forma de declaraciones y suspensiones de lazos formales.
Sin embargo, se recuerdan especialmente dos episodios: la visita del revolucionario argentino Ernesto Che Guevara a la Franja de Gaza en 1959 y la participación de tropas de La Habana en la guerra de Iom Kipur, del lado de los países árabes y contra Israel.