Era mediados del siglo pasado, y el argentino Ernesto «Che» Guevara cumplía una breve visita a la Franja de Gaza que no muchos recuerdan.
En 1959, pocos meses después del triunfo de la revolución en Cuba, el flamante jefe del gobierno en La Habana, Fidel Castro, despachó al guerrillero argentino a una gira internacional para buscar apoyo de países «no alineados».
Así, el «Che» recorrió Pakistán, la India, Yugoslavia, Sudán y Marruecos, entre otras naciones.
Pero la gira comenzó en Egipto, donde ya gobernaba el controvertido Gamal Abdel Nasser, el hombre que se presentaba al mundo como el líder «pan-árabe» y «socialista».
El hombre que poco después se iba a convertir en ministro de Industria de Cuba llegó a El Cairo en junio de 1959, para una etapa de su viaje que incluyó, además, una breve visita a la Franja de Gaza.
Según los reportes de época y las investigaciones de los historiadores, fue el propio «comandante» quien le pidió a Nasser llegar hasta el enclave palestino sobre el Mediterráneo.
Y si bien quedan pocos detalles de primera mano sobre el paso del revolucionario latinoamericano por Gaza, la visita generó una verdadera mitología entre muchos palestinos, que sobrevive hasta ahora.
«Guevara dijo muy poco durante su escala palestina, incluso durante su tour por los campos de refugiados, aunque no dio la impresión de simpatizar con las autoridades egipcias», señaló el profesor francés Jean-Pierre Filiu en su libro «Histoire de Gaza».
De hecho, añadió, «el anti-comunismo de Nasser, expresado virulentamente en la propaganda egipcia de la época, debe haber hecho poco por aligerar los intercambios diplomáticos» entre Guevara y sus anfitriones en El Cairo.
De visita en El Cairo, Guevara le pidió a Nasser visitar la Franja de Gaza, en ese entonces bajo control egipcio
Nasser se declaraba de alguna manera «socialista árabe», pero tanto él como sus compañeros militares del Movimiento de Oficiales Libres, que impulsó el golpe de 1952 que derrocó al rey Faruk, eran «decididamente anti-comunistas», según confirma un artículo de la revista de izquierdas Jacobin.
«En enero de 1959 -añade la publicación online-, el régimen de Nasser encarceló a casi todos los comunistas egipcios«, a los que mantuvo bajo durísimas condiciones de prisión hasta su liberación en 1964.
Según el artículo, una de las motivaciones detrás de la esa persecución era que el nuevo gobierno egipcio estaba «ansioso por asegurar a la embajada de Estados Unidos que no eran comunistas».
En ese ambiente llegó Guevara a El Cairo, desde donde partió el 18 de junio de 1959 hacia la franja de Gaza, en ese entonces bajo control, precisamente, de las fuerzas de Egipto.
Una revisión de esta historia, publicada por la revista pro-palestina Middle East Monitor, dice que el argentino fue «recibido con mucho entusiasmo» por algunos jefes de organizaciones armadas, como Abdullah Abu Sitta, líder de los fedayines.
Por supuesto, el Che aprovechó la visita para alentar a esos grupos palestinos a avanzar en sus objetivos contra Israel. Cuando lo llevaron al campamento de Bureij, en el centro de Gaza, un líder local se quejó frente al argentino por las condiciones en que vivían, todavía bajo control egipcio.
El compañero de Fidel Castro le respondió -según el reporte de Middle East Monitor- que, en lugar de quejarse, «usted debería mostrarme lo que ha hecho para liberar a su país».
Crónicas de la época afirman que el guerrillero argentino fue recibido «con mucho entusiasmo» por los palestinos
«¿Dónde están los campos de entrenamiento? ¿Dónde están las fábricas para fabricar armas? ¿Dónde están los centros de movilización?», preguntó, molesto, el guerrillero argentino.
Siempre según este informe, Guevara estuvo acompañado durante la visita a Gaza por «un experto en guerra de guerrillas», un tal «general Caprera», del que no brinda más detalles.
El autor del artículo asegura -en fuerte contraste con lo que escribió el profesor Filiu– que el jefe del régimen egipcio «se interesó mucho por la visita de Guevara» y que el viaje fue el inicio de una «relación muy estrecha de la América Latina revolucionaria con Nasser y los palestinos hasta el día de hoy».
En todo caso, es verdad que muchas organizaciones armadas palestinas se sumaron a la moda de los posters del revolucionario argentino. Y también es cierto que el impacto de la visita sigue teniendo consecuencias en Gaza.
Un video del 2013 publicado en YouTube con un resumen histórico del viaje, que incluye entrevistas con varios periodistas y dirigentes políticos, muestra en efecto a un joven de Gaza que es un ejemplo viviente de ese impacto.
El joven se llama Guevara Safadi, y en el video se declara «orgulloso de mi nombre: mi padre me lo puso en honor del héroe revolucionario».