El magnate Elon Musk, quien poco tiempo atrás había quedado envuelto en una polémica sobre mensajes antisemitas en las redes sociales, llegó de visita a Israel y este lunes recorrió la zona del ataque terrorista del 7 de octubre junto al primer ministro, Benjamin Netanyahu.
Durante el recorrido, Musk pasó por el kibutz Kfar Aza, uno de los principales escenarios de las brutalidades cometidas por el grupo islamista Hamas, que mató a 1200 personas y tomó cerca de 240 rehenes en la invasión de octubre.
Según reportó la oficina del primer ministro, Netanyahu y Musk fueron a la casa de la familia Leibstein, donde escucharon la historia de Ofir Leibstein, el presidente del Consejo Regional de Sha’ar Hanegev, asesinado el 7 de octubre en intercambios de disparos con terroristas que habían entró en el kibutz.
Luego se dirigieron a la residencia de la familia Itamari, donde Musk escuchó sobre Avigail Idan, la pequeña de cuatro años cuyos padres fueron asesinados, fue secuestrada en Gaza y liberada el domingo del cautiverio de Hamas.
Musk y las teorías conspirativas
En la casa familiar, un portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) mostró fotografías tomadas unos días después de la masacre. Al finalizar la visita, el primer ministro y el dueño de Tesla y SpaceX se dirigieron al barrio juvenil del kibutz, que sufrió la mayor parte de los horrores del ataque.

Después de la visita al kibutz, Musk y Netanyahu pasaron por la Knesset, en Jerusalén. Allí, el empresario pudo ver parte del video preparado por las FDI donde se pueden ver algunas de las atrocidades cometidas por Hamas y capturadas por los propios terroristas con sus cámaras.
A mediados de noviembre, Musk se sumergió en una controversia cuando reaccionó a un post en la red social X (antes conocida como Twitter) que repetía una teoría conspirativa antisemita y anti-minorías.
La publicación original de un usuario de X decía que los judíos impulsan un «odio dialéctico contra los blancos» y, además de renovar esa antigua historia antijudía, reportaba la supuesta presencia de «hordas de minorías inundando» los países occidentales.
A Musk se le ocurrió comentar el posteo racista con un «has dicho una gran verdad», apoyando así la teoría conspirativa de grupos de extrema derecha conocida como Great Replacement, o el Gran Reemplazo, según la cual las minorías están desplazando a la «raza blanca».
Thank you @elonmusk for visiting Israel, to see with your own eyes the atrocities committed against Jews by Hamas & some Gaza civilians.
— Ellie Cohanim (@EllieCohanim) November 27, 2023
Hamas raped women en masse, burned people alive, stabbed out the baby inside a pregnant mother…here Elon is seeing a blood soaked crib. pic.twitter.com/112cvdGTKT
El gesto de Musk tuvo serias consecuencias, ya que no solamente fue criticado públicamente por organizaciones que luchan contra el racismo y el antisemitismo sino que comenzó a perder cuentas publicitarias en X, que es de su propiedad.
«Me gustaría ayudar»
Gigantes como IBM, Disney y Apple y grandes compañías de Hollywood sacaron sus anuncios de la ex Twitter a causa del desafortunado comentario del empresario, nacido en Sudáfrica en 1971.
Ahora, Musk llegó a Israel y se puso a disposición en la lucha contra el odio racial y el terrorismo. Después de las visitas a Kfar Aza y al parlamento en Jerusalén, participó en una videoconferencia durante la cual expresó otro tipo de comentarios.
Después de escuchar a Netanyahu decir durante el chat en vivo desde Israel que Hamas debe ser destruido, Musk dijo que «no hay otra opción» frente al grupo terrorista, reportó el Jerusalem Post.
«A mí también me gustaría ayudar», afirmó el exitoso y a menudo polémico multimillonario. «No hace falta leer entre líneas, Hamas declaró claramente, una y otra vez, que quiere matar israelíes”, añadió, y concluyó: «la propaganda contra Israel debe cesar».