Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) lanzaron un ataque preventivo contra posiciones de Hezbollah en el sur del Líbano porque el grupo islamista «planeaba lastimar civiles israelíes».
Así lo aseguró este domingo uno de los portavoces de las FDI, el contralmirante Daniel Hagari, según el cual las defensas antiaéreas israelíes lograron contener casi en su totalidad la lluvia de cohetes disparada en represalia por Hezbollah.
Durante la incursión israelí, de la que tomaron parte cerca de cien aviones de combate, «aproximadamente el noventa por ciento de los objetivos alcanzados eran cohetes de corto alcance dirigidos al norte de Israel», indicó Hagari.
Hezbollah, continuó el vocero, «planeaba lastimar civiles israelíes», pero solamente logró disparar «unos doscientos treinta cohetes» y alrededor de veinte drones explosivos contra el norte del país.
La mayor parte de esos proyectiles y drones, completó el portavoz, «cayeron en su camino hacia territorio israelí» o en áreas abiertas, o «fueron interceptados por los sistemas de defensa de la Fuerza Aérea y los barcos de la Armada israelí».
Hezbollah quiso alcanzar los centros de la inteligencia israelí
A pesar de que los cohetes lanzados desde el Líbano no provocaron mayores daños, el líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, afirmó este domingo que la oleada de proyectiles disparada por el grupo islamista se completó «según lo planeado».
מצורפת אילוסטרציה בנושא תקיפות צה״ל בדרום לבנון>> pic.twitter.com/Fs1lRiIUGD
— צבא ההגנה לישראל (@idfonline) August 25, 2024
En su visión del episodio, Nasrallah dijo que los dos objetivos principales atacados por sus drones fueron la base Glilot, en la periferia norte de Tel Aviv, donde se ubica la unidad de inteligencia de élite 8200 de las FDI, junto a la sede del Mossad, y otra instalación militar no especificada.
Por su parte, y mientras la prensa local hablaba de otros posibles ataques preventivos de las FDI contra Hezbollah, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, aseveró que la incursión sobre el Líbano «no es el final de la historia».
«Nasrallah en Beirut y (el ayatollah) Khamenei en Teherán deben saber que este es un paso más para cambiar la situación en el norte y devolver a nuestros residentes a sus hogares de manera segura», advirtió.
Las FDI «llegaron antes»
Según una reconstrucción de los hechos de este domingo publicada en el portal del diario Maariv, Hezbollah planeaba lanzar unos 6.000 cohetes contra Israel, incluyendo algunos dirigidos a blancos en el centro del país.
El ataque se iba a llevar a cabo a las cinco de la mañana (hora local), pero la incursión preventiva de la Fuerza Aérea destruyó cientos de lanzadores de cohetes en el sur del Líbano, por lo cual Hezbollah apenas pudo disparar 230 proyectiles y un puñado de drones explosivos.
I’m not sure people appreciate what the IDF did last night in Lebanon. About 100 aircrafts took out a series of launchers that were locked, loaded and aimed at Tel Aviv. Hezbollah was planning to attack at 5am, our men and women got there earlier. pic.twitter.com/OhaGSFrHJn
— Yael Bar tur 🎗️ (@yaelbt) August 25, 2024
«No estoy segura de que la gente aprecie lo que las Fuerzas de Defensa de Israel hicieron anoche en el Líbano», escribió una comentarista en la red social X (antes Twitter).
«Unos 100 aviones -destacó-derribaron una serie de lanzacohetes que estaban preparados, cargados y apuntados hacia Tel Aviv».
«Hezbollah planeaba atacar a las 5 de la mañana, nuestros hombres y mujeres llegaron antes», completó.
¿Primera fase?
Voceros del grupo islamista señalaron que el desbaratado ataque iba a ser la «primera fase» de la represalia por la muerte de uno de sus principales líderes, Fuad Shukr, alcanzado por la aviación militar israelí en Beirut en los últimos días de julio.
Shukr era considerado responsable, entre otros muchos ataques, del lanzamiento de los cohetes que causaron la masacre de Majdal Shams, donde doce niños residentes de las Alturas del Golan murieron el 27 de julio al ser alcanzados por un misil del grupo islamista.
Hezbollah arrancó una nueva campaña de lanzamiento de cohetes el 8 de octubre del 2023, al día siguiente del salvaje ataque de Hamas -otra organización islamista patrocinada por Irán- contra el sur de Israel.
Aquel 7 de octubre, miles de activistas de Hamas entraron al país y asesinaron a 1200 personas, además de capturar decenas de rehenes, lo que desató la actual guerra en la Franja de Gaza.
No se descarta que las FDI lleven a cabo otra acción preventiva contra las posiciones de Hezbollah.
De hecho, Hagari pidió a los civiles libaneses «que se encuentran en las zonas donde opera Hezbollah que se aparten de inmediato del peligro por su propia seguridad».