Las autoridades israelíes ofrecieron públicamente ayuda humanitaria para El Líbano -país con el que se encuentra técnicamente en estado de guerra- tras las explosiones del martes último en Beirut
«Bajo las instrucciones del ministro de Defensa y el ministro de Exteriores, Israel se acercó al Líbano a través de funcionarios diplomáticos internacionales y ofreció ayuda médica humanitaria» al gobierno de Beirut, dijo el vocero en lengua árabe de las fuerzas armadas israelíes, el teniente coronel Avichay Adraee.
«Ahora es el momento de ponerse por encima de cualquier conflicto», dijo otro de los voceros de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), el brigadier general Hidai Zilberman, en referencia al estado de guerra con el país vecino, en especial con el grupo militar islámico Hezbollah.
Por su parte, el presidente Reuven Rivlin dijo que Israel «comparte el dolor del pueblo libanés en este momento de desastre y extiende su mano para ayudar en este momento difícil».
Según informó la prensa israelí, las autoridades de Jerusalén pusieron en marcha preparativos para recibir en el país a los miembros de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para el Líbano (UNIFIL, por su sigla en inglés) que hayan resultado heridos por las explosiones.
De concretarse el traslado, los militares de la ONU serían atendidos en el Hospital Rebecca Sieff, en Safed, en el norte del país.
El gobernador de Beirut, Maruan Abboud, afirmó este miércoles que aún hay más de 100 desaparecidos y más de 200.000 personas se quedaron sin hogar tras la explosión que el martes causó más de un centenar de muertos y de 4.000 heridos en la capital libanesa.