El secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, y el ministro de Exteriores de Israel, Yair Lapid, advirtieron que existen «otras opciones», además de la diplomacia, para frenar las ambiciones nucleares de Irán
Hablando este miércoles durante una conferencia de prensa tras reunirse con Blinken y con su colega de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), Abdullah Bin Zayed Al Nahyan, Lapid dijo que «cada día que pasa, cada retraso en las negociaciones acerca a Irán a una bomba nuclear».
Irán está participando en negociaciones internacionales, de las cuales también toma parte Estados Unidos, para revivir el acuerdo firmado en el 2015 con el gobierno del entonces presidente norteamericano, Barack Obama, pero las tratativas están empantanadas.
En líneas generales, el acuerdo debería levantar las sanciones internacionales sobre Irán a cambio de que las autoridades de Teherán permitan una supervisión externa de sus plantas atómicas.
Israel no cree en ese tratado, tal como dejó en claro Lapid, quien afirmó que los iraníes «claramente» están retrasando las negociaciones, «tratando de engañar al mundo para seguir enriqueciendo uranio» y «desarrollar su programa de misiles balísticos».
Israel «se reserva el derecho de actuar en cualquier momento, de cualquier forma», advirtió Lapid
«Si un régimen terrorista va a adquirir un arma nuclear, debemos actuar», afirmó el ministro israelí. «Debemos dejar en claro que el mundo civilizado no lo permitirá», apuntó.
Lapid advirtió que Israel «se reserva el derecho de actuar en cualquier momento, de cualquier forma» sobre las plantas atómicas iraníes. «Ese no es solo nuestro derecho, también es nuestra responsabilidad», añadió.
«Irán ha declarado públicamente que quiere acabar con nosotros» y «no tenemos ninguna intención de permitir que esto suceda», cerró el jefe de la diplomacia de Jerusalén.
Blinken, por su parte, aseguró que los tres países representados en la rueda de prensa «estamos unidos en la convicción de que no se puede permitir que Irán adquiera un arma nuclear», pero reconoció que, en Washington, «creemos que la vía diplomática es la forma más eficaz de garantizar que eso no suceda».
De todas maneras, el ministro de Exteriores norteamericano reconoció que «estamos preparados para recurrir a otras opciones si Irán no cambia de rumbo, y estas consultas con nuestros aliados y socios son parte de eso».