El grupo terrorista Hamas devolvió este miércoles otro grupo de rehenes secuestrados durante el ataque del 7 de octubre en el último día del cese del fuego, y ahora se negocia, con dudas, una eventual nueva extensión de la tregua en la guerra de Gaza.
A cambio, Israel excarceló a otros treinta presos palestinos, que habían sido sentenciados por delitos de terrorismo. Hamas también liberó a cuatro trabajadores tailandeses cuyos nombres no fueron revelados de inmediato.
La jornada comenzó con la liberación de dos mujeres con doble nacionalidad rusa e israelí, Elena Trupanov, de 50 años, y su madre Irena, de 73. Como en el caso de Roni Kriboi, ambas fueron entregadas como un reconocimiento a la posición pro-palestina del presidente de Rusia, Vladimir Putin.
Luego fue el turno de otros diez secuestrados, un grupo que incluyó mujeres y adolescentes: Ofir Engel, de 17 años, Liam Or (18), Itai Regev (18), Amit Shani (16), Raya Rotem (54), Raz Ben Ami (57), Yarden Roman Gat (36), Liat Atzili (49), Moran Stella Yanai (40) y Gali Tarshantsky (13).
Este miércoles fue el sexto día de la tregua en la guerra entre Israel y Hamas en Gaza, que estalló después de que militantes del grupo terrorista atacaron el sur del país el 7 de octubre, asesinando a 1200 personas y tomando decenas de cautivos que llevaron al enclave palestino.
Las conversaciones están en curso en un esfuerzo por extender el cese del fuego antes de que expire la extensión por dos días del plazo original de cuatro. Pero las perspectivas, al menos en la noche del miércoles, no eran alentadoras.
Las autoridades de Qatar, que están liderando las tratativas con el grupo terrorista que controla (o controlaba) Gaza, se mostraron optimistas y hasta declararon que, después de la liberación de mujeres y niños habría llegado el momento de «la liberación» del resto de «los civiles».
Por su parte, el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, quien se preparaba para viajar una vez más a Israel, dijo que «liberar más rehenes y entregar más ayuda humanitaria» en Gaza son las prioridades del gobierno del presidente Joe Biden.
De todas maneras, aunque la tregua se extienda, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo que las fuerzas militares están listas para retomar la campaña Espadas de Hierro en Gaza apenas termine el cese del fuego.
Netanyahu dijo que, desde el comienzo de la guerra, el gobierno y las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) se impusieron tres objetivos: «la eliminación de Hamas, el regreso de todos nuestros secuestrados y garantizar que Gaza nunca más vuelva a ser una amenaza» para el país.
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— Benjamin Netanyahu - בנימין נתניהו (@netanyahu) November 29, 2023
«Esos tres objetivos siguen vigentes», advirtió. El primer ministro reconoció que la devolución de decenas de rehenes durante la tregua fue «un gran logro», pero reiteró que «una vez agotada esta fase de retorno de nuestros secuestrados», las FDI volverán «inequívocamente» al combate en Gaza.
La renovación de la guerra, sin embargo, está creando problemas para el gobierno de Israel, comenzando por una oposición de la Casa Blanca a la ampliación de las operaciones al sur de Gaza, adonde se había movilizado gran parte de la población civil del enclave palestino.
«Netanyahu le dijo a Biden que es necesario lanzar una operación militar en el sur de Gaza para lograr la destrucción de la organización terrorista», señaló un reporte estadounidense citado por la prensa israelí.
Sin embargo, precisó el diario Maariv, Biden le respondió que «no es posible operar en el sur de Gaza de la misma manera que las fuerzas operaron en el norte», donde hasta antes de la tregua las FDI destruyeron una gran parte de las infraestructuras de Hamas y eliminaron a muchos de sus líderes.