El primer ministro de Israel, Yair Lapid, le deseó este jueves a Benjamin Netanyahu, su probable sucesor tras las elecciones del martes de esta semana, «buena suerte» en su próxima gestión
Netanyahu y el bloque de derecha que lo sostiene lograron una resonante victoria en los comicios legislativos, sumando sesenta y cuatro escaños de los 120 de la próxima Knesset.
Ese número le permite a Netanyahu ponerse cómodamente primero en la fila para recibir el encargo de formar gobierno, una tarea que, se descuenta, será exitosa, ya que cuenta con el apoyo de los partidos religiosos y ultranacionalistas.
«El estado de Israel está por encima de cualquier consideración política», dijo Lapid en un comunicado en el que reconoció la dura derrota. «Deseo a Netanyahu buena suerte para el pueblo de Israel y el estado de Israel», remarcó el primer ministro.
Lapid llegó al poder en junio del año pasado como parte de una variopinta coalición cuyo principal objetivo era, justamente, evitar una nueva reelección de Netanyahu.
De esa alianza formaron parte líderes de la derecha como Naftali Bennett -quien actuó como primer ministro al principio de esa gestión que termina-, formaciones de izquierda, el centrista Yesh Atid de Lapid y alianzas árabes.
«El estado de Israel está por encima de cualquier consideración política», dijo Lapid
La coalición anti-Netanyahu se fue erosionando lentamente por dentro y el proceso llevó a las elecciones de esta semana, en las cuales el Likud del ex primer ministro sumó treinta y dos bancas, bien por delante del segundo, Yesh Atid, que se lleva veinticuatro escaños.
En tercer lugar quedó la sorpresa del año, la formación de ultraderecha Partido Religioso Nacional, cuyos líderes, Itamar Ben-Gvir y Bezalel Smotrich, son señalados como seguros miembros del próximo gabinete.
אני מבקש להודות לאזרחי ישראל על התמיכה האדירה שלכם.
— Benjamin Netanyahu - בנימין נתניהו (@netanyahu) November 3, 2022
יחד הבאנו נצחון ענק למדינת ישראל.
תודה גדולה מעומק הלב ???????????? pic.twitter.com/wZ8ViIqYrz
Unidad Nacional, del ministro de Defensa, Benny Gantz, sumó doce bancas, seguido por los ultra-religiosos Shas (once) y Judaísmo Unido de la Torá (siete), Israel Beiteinu (seis), las formaciones árabes Ra’am y Hadash-Ta’al (las dos con cinco) y, finalmente, el histórico Laborismo, con apenas cuatro.
A través de un mensaje en Twitter, Netanyahu agradeció «a los ciudadanos de Israel por su tremendo apoyo».
«Juntos trajimos una gran victoria al estado de Israel», aseguró el hombre que permaneció más tiempo en el sillón de primer ministro, y que está listo para extender ese récord.
Se espera que en los próximos días, el presidente de Israel, Itzjak Herzog, le presente a Netanyahu el encargo para formar gobierno, algo que el ex primer ministro ya se declaró listo para completar lo antes posible.