En 1981, Itzik Amzallag comenzó a trabajar como voluntario en el Magen David Adom (MDA), el servicio nacional de emergencias de Israel, y «se enamoró» de la institución. Tanto que, años después, comparte turnos con su hijo en una de las ambulancias de cuidados intensivos
Según relata el MDA en su website, Itzik y su hijo, Amir, se graduaron recientemente del curso de paramédicos de la organización. Es la culminación de la larga carrera de ambos en el servicio de emergencias.
Amir, el más joven de los Amzallag, de 25 años, arrancó a los 15 como voluntario juvenil. Ahora es el jefe interino del despacho de primeros socorros del Centro Nacional de Operaciones del MDA en Kiryat Ono, en los alrededores de Tel Aviv.
Itzik, por su parte, cumplió recientemente 53 años y es el manager interino de la estación del MDA en Kiryat Malahi, en el sur del país, a pocos kilómetros de Ashkelon.
A pesar de trabajar en distintos puestos, cuando completaron el curso de paramédicos decidieron compartir turnos de servicio en la misma unidad, cuenta el artículo del sitio de internet del MDA.
«Esto no es algo que todos los padres e hijos puedan hacer, y eso hizo que nuestro primer turno juntos fuera muy especial», confesó Itzik.
«Logramos separar las cosas durante el turno en el que trabajamos de manera profesional, sin importar que seamos familiares», dice el padre. «A pesar de esto, la experiencia es genial y tenemos mucho de qué hablar en las cenas de Shabat», reconoce.
Cuando hay que afrontar alguna emergencia, «la última palabra por supuesto es de papá, que lleva 40 años en la organización y tiene mucha experiencia, pero trabajamos muy bien juntos«, admitió Amir.
Y, en el momento de viajar juntos en la ambulancia, «la sensación es muy especial, no es algo que les pase a todos», resumió.