Comenzó con una corazonada de dos importantes científicos israelíes y ahora está en desarrollo: un posible tratamiento en base a la papaya de la fibrosis quística infantil, una enfermedad hereditaria que causa daños graves a los pulmones, al sistema digestivo y a otros órganos del cuerpo.
El trastorno genera un proceso de acumulación de mucosa que obstruye esos. Los síntomas pueden incluir tos persistente, infecciones pulmonares frecuentes incluyendo neumonía o bronquitis, crecimiento deficiente o pérdida de peso.
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Con el tiempo, explican las fuentes médicas sobre esta enfermedad que todavía no tiene cura, la acumulación de mucosa y las infecciones pueden conducir a daños pulmonares permanentes.
Además, los tratamientos disponibles, que incluyen terapia respiratoria, medicamentos inhalados y suplementos nutricionales o de enzimas pancreáticas, suelen ser muy caros y de alcance limitado.
Frente a esto, la statup israelí ODE Pharm decidió apostar a la corazonada de los dos científicos israelíes, el profesor Shmuel Ben-Sasson y su colega Aaron Ciechanover, premio Nobel de Química 2004.
El líquido de la papaya
Ben-Sasson y Ciechanover, reconocidos por su trabajo sobre salud y longevidad, descubrieron una molécula presente de forma natural en el líquido de la papaya, bautizada ODE-001.
Los científicos vieron en la molécula la capacidad de ser insertada en células y hacerlas más resistentes a la inflamación y otras formas de deterioro y pasaron esa información en el 2020 al Pollen Group, que adquirió los derechos de propiedad intelectual.
El Pollen Group es el grupo inversor detrás de ODE Pharma, fundada por los emprendedores Assaf Bivas y Asaf Ofer.
«Vimos el potencial que tenía» el ODE-001, señaló Bivas durante una entrevista con el portal NoCamels. «Es novedoso y nadie lo había usado antes, no había nada documentado al respecto, así que fue solo una corazonada, y la corazonada era muy, muy fuerte», describió.
Los ingenieros de ODE Pharma probaron la molécula en laboratorio, insertándola en el tejido epitelial (la fina capa protectora que cubre todas las superficies del cuerpo) de células sanas que se encuentran tanto en los pulmones como en el intestino.
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Bivas le dijo a NoCamels que su equipo quedó «encantado» al ver que el ODE-001 efectivamente extendió la vida de las células sanas en casi un 50 por ciento y que, en el caso de células inflamadas, era igual de efectivo o más.
«Descubrimos que la molécula es un agente antiinflamatorio muy, muy fuerte que rehabilita la célula misma», afirmó Bivas en referencia a las capacidades de la papaya contra la enfermedad.
Un precedente durante la pandemia
La startup también produjo píldoras conteniendo ODE-001 durante la pandemia de coronavirus, que fueron suministradas a pacientes con COVID, y los resultados, dijo el emprendedor, «fueron sorprendentes».
Ahora, ODE Pharma ya recaudó 1,5 millones de dólares en fondos de financiación y está en proceso de recaudar otros cinco millones, señaló el reporte. La empresa espera iniciar ensayos clínicos para ODE-001 como tratamiento para la fibrosis quística en niños en el 2025.
El objetivo principal, adelantó, es conseguir la aprobación inicial de la FDA, la agencia que regula los medicamentos en Estados Unidos, para poder acelerar su desarrollo.
