A través de un proceso de micro-operaciones, cirujanos del Centro Médico de Galilea, el segundo hospital más grande del norte de Israel, lograron devolverle la sonrisa a una joven de 17 años
El equipo de cirujanos plásticos israelíes, encabezado por el doctor Amin Abu Jabal, llevó a cabo las dos operaciones -una de ellas realizada por primera vez en el país- con nueve meses de diferencia.
La joven, reportó el diario Maariv, padecía una parálisis congénita del nervio facial de un lado, lo que le provocaba una asimetría y la incapacidad para completar gestos básicos, como sonreír o cerrar un ojo.
A través del complejo proceso micro-quirúrgico, en un procedimiento conocido como «reanimación facial», los cirujanos plásticos israelíes apuntaron a restaurar la función de los músculos de la expresión de la cara y el párpado inferior de la joven.
Se trato de una operación «única y extremadamente compleja que requirió una gran habilidad en el campo de la microcirugía»
Según precisó el informe del diario israelí, en la primera etapa los médicos extirparon un nervio sensorial de unos 30 centímetros de largo de la parte posterior de la pierna del paciente, y lo dividieron en dos.
Las partes fueron luego trasplantadas a la mejilla derecha y a la parte inferior de uno de los párpados, también del lado derecho de la cara de la joven, y se llevó a cabo una sofisticada conexión con los nervios.
En la segunda operación, que duró ocho horas, los expertos del hospital en Galilea implantaron músculo en la mejilla izquierda paralizada y lo conectaron a la comisura de la boca y el área de la sien izquierda.
Finalmente, y por primera vez en Israel, los cirujanos trasplantaron un injerto de músculo al párpado inferior, que se conectó al nervio previamente injertado. «La operación salió bien y después de una semana de hospitalización, la paciente fue enviada a casa», apuntó Maariv.
«Esta fue una operación única y extremadamente compleja que requirió una gran habilidad en el campo de la microcirugía», reconoció el doctor Abu Jabal.
«Después de un período de seguimiento de un año -completó el médico del hospital israelí-, la operación ha sido declarada un gran éxito y ahora la adolescente puede sonreír espontáneamente y cerrar su ojo izquierdo libremente por primera vez en su vida».