La tercera cuarentena social de aislamiento comenzó este domingo en Israel y, en principio, durará dos semanas, aunque las autoridades estiman que podría extenderse por un mes mientras no caiga el índice de contagios de coronavirus
Este nuevo cierre -que arrancó a las 17, hora local- será bastante estricto, ya que los israelíes no podrán visitar amigos o familiares fuera del núcleo más cercano que habita en el mismo hogar, y no podrán alejarse a más de mil metros de sus casas.
Sin embargo, en una medida que despertó gran controversia en el país, seguirán funcionando las escuelas, aunque con un estricto protocolo de higiene y seguridad.
Estarán cerrados los comercios, salvo aquellos que presten servicios esenciales, los transportes públicos funcionarán a la mitad de su capacidad y aquellos que violen las normas de la cuarentena serán penados con multas de hasta 500 shekels (unos 155 dólares estadounidenses).
«Estamos en una carrera entre la creciente morbilidad» a causa de la pandemia de coronavirus y la acción de las vacunas, dijo el jefe de las políticas contra el coronavirus en Israel, Nachman Ash, en referencia a la campaña nacional de inoculación que comenzó a mediados de mes.
El sábado último, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo esperar que al menos 2,25 millones de ciudadanos hayan recibido las dos dosis de la vacuna para fines de enero próximo.